Los cultivos de abono verde son plantas anuales o perennes que se plantan inmediatamente después de la cosecha. Aplicar abono verde al huerto en otoño ayuda a enriquecer el suelo con nutrientes y a mejorar el crecimiento de otros cultivos. Estas plantas crecen rápidamente por encima del suelo y desarrollan un sistema radicular fuerte. Se utilizan en campos, invernaderos y huertos para aumentar la producción al año siguiente.
Finalidad del abono verde de otoño
El uso de abono verde en otoño se considera el método más sencillo y accesible para restaurar la fertilidad de una parcela. Estos cultivos ayudan a preparar los lechos para la siembra de primavera. La correcta incorporación de abono verde al suelo puede producir muchos resultados positivos:
- Enriquecer el suelo con sustancias valiosas.
- Normalizar la estructura del sustrato. El abono verde se utiliza para mejorar la soltura y la permeabilidad del suelo.
- Deshazte de las malas hierbas. Es importante recordar que si los cultivos de abono verde no se podan antes de que produzcan semillas, se convertirán en malas hierbas.
- Proteja las camas de plagas, infecciones y podredumbre.
- Proteger las plantaciones de las heladas recurrentes en primavera.
- Conservar la capa de nieve en los parterres. Los cultivos de invierno ayudan a retener la humedad en la estructura del suelo.
Las plantaciones de otoño pueden dejarse durante el invierno o enterrarse hasta las primeras heladas. A veces, solo se deja que se descomponga el sistema radicular. En este caso, las hojas cortadas se utilizan como mantillo o compost.
Tipos de uso frecuente
Diversos cultivos pueden utilizarse como abono verde. Sus efectos y características de crecimiento difieren.
Cebada
Este es un abono verde poco exigente que protege el suelo de la erosión y la lixiviación. Al plantarlo con cebada, ayuda a aflojar el suelo y a retener la humedad. Normalmente se utiliza antes de plantar trébol, maíz y patatas. Sin embargo, los expertos desaconsejan plantar cereales después de la cebada.

Arveja
Esta planta pertenece a la familia de las leguminosas. Ayuda a enriquecer el suelo con nitrógeno y a aflojarlo. Sin embargo, no debe cultivarse en suelos demasiado ácidos o salinos.
Este cultivo puede ser un excelente precursor para casi cualquier planta. Es ideal para repollo, zanahoria, remolacha y papa. También puede plantarse antes de tomates, pimientos, berenjenas, calabazas, hortalizas y muchos otros cultivos.
La planta es ideal para combinarla con avena. Esta combinación permite que la leguminosa trepe por la avena. Al plantarla en el centro y los bordes de un bancal de fresas, no será necesario cubrirla durante el invierno. El abono verde maduro cubrirá los arbustos de bayas y evitará que se congelen.

En las regiones del norte, la arveja puede plantarse desde agosto hasta principios de septiembre. Sin embargo, en el sur, no debe hacerse antes de octubre. De lo contrario, el abono verde inhibirá el crecimiento de las fresas.
Mostaza
Esta planta es apta para diversos tipos de suelo. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la mostaza requiere mucha humedad y luz. Este abono verde enriquece el suelo con fósforo y potasio, gracias a su conversión a una forma fácilmente digerible. La mostaza también ayuda a enriquecer el suelo con azufre.
Esta planta ayuda a suprimir el crecimiento de malezas. También resiste bien el tizón tardío. También se puede usar para combatir gusanos de alambre, nematodos, babosas y larvas de abejorro. La mostaza es una excelente planta melífera que atrae insectos beneficiosos. Sin embargo, en primavera, suele verse afectada por pulgas.

La mostaza es un precursor ideal para tomates, patatas, zanahorias, pimientos y remolachas. Sin embargo, no debe utilizarse después de cultivos crucíferos como la col, los rábanos, los nabos y los berros.
Violación
Este abono verde ayuda a enriquecer el suelo con potasio, azufre y fósforo. No debe utilizarse en suelos ácidos, arenosos o encharcados. La colza elimina las malas hierbas y protege los bancales de enfermedades y plagas. También se ha reportado como un preventivo eficaz contra diversos tipos de podredumbre.
La colza es un excelente precursor de la berenjena, la zanahoria y el tomate. Puede sembrarse después remolacha, calabacín, pepino, judías verdes, soja y lentejas. Sin embargo, no se recomienda plantar nabos, col, rábanos, daikon ni otras crucíferas después de este abono verde.

Centeno
El centeno de invierno enriquece el suelo con nitrógeno. Este abono verde también aumenta la disponibilidad de potasio y fósforo para las plantas. Afloja el suelo perfectamente y ayuda a eliminar las malas hierbas. Controla eficazmente la grama y el cardo silvestre.
Se recomienda sembrar el centeno por separado, ya que no tolera la siembra junto a otros abonos verdes. Este cultivo previene eficazmente el desarrollo de infecciones fúngicas gracias a sus potentes propiedades desinfectantes. Repele fácilmente diversos parásitos, en particular los nematodos.
Al centeno se le pueden añadir tomates, patatas, pimientos y berenjenas. Este abono verde también se considera un excelente precursor del calabacín, el pepino y la calabaza. Otra ventaja del centeno es su disponibilidad. Entre sus desventajas, su difícil incorporación al suelo.

Avena
Sembrar avena ayuda a lograr diversos efectos beneficiosos. Este abono verde enriquece el suelo con potasio y fósforo, poniendo estos elementos a disposición de las plantas. Sin embargo, la avena no es especialmente rica en nitrógeno.
La planta ablanda perfectamente el suelo y mejora la circulación del aire en sustratos arcillosos. Ayuda a eliminar las malas hierbas, a prevenir la pudrición de las raíces y a proteger contra bacterias y hongos.
La avena se considera un excelente precursor del tomate, la papa y el pimiento. Se recomienda plantarla antes del pepino, la berenjena y la calabaza. Para mejorar la saturación de nitrógeno del suelo, conviene combinarla con arveja.

Cuándo sembrar
En la región central de Rusia y Moscú, se recomienda plantar las plantas a finales de agosto o septiembre. Esto les dará tiempo para absorber los nutrientes del suelo y echar raíces. Esto evitará que las lluvias otoñales arrastren el suelo. Si necesita mejorar la fertilidad del suelo arcilloso, es recomendable hacerlo a finales de otoño, antes de las primeras heladas.
En Siberia y otras regiones, la época de siembra de abonos verdes varía. Debe comenzar a finales de julio. Antes de las primeras heladas, los tallos de los cultivos deben alcanzar de 5 a 10 centímetros. La cebada se suele plantar en agosto, y la avena, el trébol, la arveja, el centeno y el altramuz se plantan a mediados de otoño.

Cómo plantar correctamente
Para lograr los resultados deseados, es importante plantar correctamente los abonos verdes. Siga estas pautas:
- Antes de plantar abonos verdes, se deben limpiar las camas de otras plantas. Se debe prestar especial atención a los tallos dañados o enfermos y a las malezas.
- Antes de plantar abono verde en un suelo empobrecido, vale la pena agregar potasio y fósforo.
- Se recomienda labrar la tierra seca a una profundidad de 5 a 10 centímetros. Después, aflójela y riéguela abundantemente. El abono verde solo se puede sembrar después de 2 o 3 días.
- Evite plantar estos cultivos en surcos. Deben distribuirse uniformemente sobre la superficie del suelo y cubrirse con una fina capa de tierra o compost. Los cultivos de abono verde deben plantarse con bastante densidad.
Los cultivos que han comenzado a crecer deben dejarse en la tierra hasta la primavera. Los cultivos de invierno toleran bien el frío y proporcionan una protección fiable al suelo. Su desarrollo se detendrá en invierno, pero se reanudará en primavera. Una vez que comience el crecimiento verde, se recomienda segar el cultivo y dejarlo en la superficie del suelo durante 2 a 4 semanas. Tras la siembra, se debe labrar la tierra.

Momento de cortar el césped y qué hacer a continuación
El momento de la cosecha de las plantas se determina individualmente. Esto depende de las características del suelo y las preferencias personales. Una vez que el abono verde haya crecido, puede proceder de la siguiente manera:
- Una o una semana y media antes de la llegada del frío, se deben cortar los tallos de abono verde hasta la raíz. Con la llegada de la primavera, se recomienda enterrar el abono verde. Después, se pueden plantar hortalizas. El abono verde descompuesto también se puede utilizar como mantillo o compost.
- Los cultivos de abono verde pueden dejarse en pie en lugar de segarlos antes del invierno. Los tallos altos atrapan la nieve y protegen el suelo de las heladas. Esto garantiza que el suelo se beneficie al máximo de los cultivos de abono verde. Después de que la nieve se derrita, la vegetación debe rastrillarse en un montón y quemarse. Se recomienda excavar la ceniza resultante para integrarla en el suelo. Esto aumentará significativamente el rendimiento de las plantas cultivadas.
- Los cultivos de abono verde plantados en otoño pueden desenterrarse antes de la primera helada. Esto puede hacerse en octubre. No se deben podar los tallos. La hierba que crece puede usarse para compost. En primavera, se vuelve a desenterrar la tierra. Luego, se puede proceder a la siembra de los cultivos principales.

Cada método de recolección de abono verde tiene sus propias ventajas. Por lo tanto, puede elegir cualquiera según sus preferencias. Dado que las condiciones del suelo varían según el lugar, vale la pena probar todos los métodos descritos. Solo con la práctica podrá determinar cuál es el más efectivo.
Los cultivos de abono verde plantados en otoño son muy eficaces y pueden mejorar significativamente el estado incluso de suelos muy deteriorados. Sin embargo, es fundamental tener cuidado. Si la siembra y el corte no se realizan correctamente, los cultivos de abono verde pueden invadir toda la parcela y convertirse en maleza. En este caso, erradicarlas será muy difícil.



