- Características del iris reticulado
- Condiciones óptimas
- Úselo para decorar parterres de flores.
- Variedades populares
- Catarina Hodgkin híbrida
- Iris de la señora Dunford
- Natasha
- Joyce
- Yenín
- Paulina
- Armonía
- Plantación y cuidados en campo abierto
- Selección del sitio y preparación del suelo
- Esquemas y épocas de plantación de bulbos
- Riego y fertilización
- Tratamientos preventivos
- Guarnición
- Preparándose para la temporada de frío
- Métodos de reproducción
- Problemas y soluciones
El Iris reticulata es una de las plantas favoritas de los jardineros que cultivan bulbos perennes. Esta atractiva planta luce hermosa en parterres y deleita la vista durante su largo periodo de floración. Antes de plantar y cuidar el Iris reticulata, es importante que todo jardinero se familiarice con sus características y requisitos.
Características del iris reticulado
Los lirios reticulados también se conocen como "iridodictyum" o "reticulado". También se pueden encontrar "union" y "xiphium" en los catálogos de conocidas empresas de plantas ornamentales. Esta planta se conoce comúnmente como iris campanilla de invierno debido a su floración temprana. Su exotismo es tan marcado que algunos expertos confunden los lirios reticulados con las orquídeas.
Esta planta se caracteriza por ser una pequeña planta bulbosa, de no más de 17 cm de altura. Sus hojas tienen una forma peculiar de punzón, que la distingue de otras variedades. Es apreciada por los jardineros por su floración temprana, con cogollos nítidos y multicolores de unos 6-8 cm de diámetro. No aparecen más de dos flores por tallo. El color de los pétalos varía según el cultivar; algunas variedades presentan patrones únicos y toques de diversos tonos.
Las variedades comunes incluyen lirios con colores blanco, rojo, rosa, azul y morado.
Tras la floración, se forman pequeñas vainas de semillas en los arbustos de Iris reticulata. Estas se cosechan en verano y se plantan inmediatamente. Con el calor, el brote deja de florecer, se seca y toda la parte aérea se marchita. En la segunda mitad del verano, la planta entra en letargo. El Iris reticulata produce un promedio de cuatro bulbos nuevos al año. El material de plantación es un bulbo pequeño de 3 cm de largo y 1,5 cm de diámetro. La cubierta superficial es una vaina fibrosa reticulada, de ahí el nombre de la especie.

Condiciones óptimas
A la hora de plantar, es necesario tener en cuenta las condiciones óptimas para la germinación de los lirios reticulados para cumplir correctamente con todas las normas agrícolas:
- ubicación soleada;
- suelo suelto, fértil y arenoso;
- suelo neutro, alcalino;
- falta de aguas subterráneas;
- invernar con abrigo o colocar los bulbos en un lugar seco.
Aunque la planta se puede encontrar en estado silvestre, es importante seguir todos los requisitos al cultivarla.
Úselo para decorar parterres de flores.
Los lirios reticulados no requieren grandes parcelas debido a su floración temprana. Los paisajistas utilizan estas plantas para decorar diversas composiciones de jardín, así como jardines alpinos y parterres. Al crear un paisaje, los especialistas suelen guiarse no solo por sus propias preferencias estéticas, sino también por las características y necesidades de la planta. Por ejemplo, si los lirios prefieren un suelo neutro, sus vecinos también deberían prosperar en condiciones similares. Entre los posibles vecinos de los lirios reticulados se incluyen los azafranes y las plantas perennes con raíces pequeñas que no se extiendan demasiado ni dañen el bulbo.

Variedades populares
Existen diversas variedades de lirios reticulados que son especialmente populares entre los jardineros debido a sus características individuales y rasgos inusuales.
Catarina Hodgkin híbrida
Este híbrido se desarrolló en la década de 1960 y aún se considera el mejor entre los lirios reticulados. Su principal característica son sus grandes flores, que alcanzan los 10 cm de diámetro. Los pétalos tienen un tono azul y desprenden una fragancia fresca.
Esta variedad es resistente a fluctuaciones repentinas de temperatura y puede crecer en suelos húmedos. Puede sobrevivir en un mismo lugar hasta cinco años, tras lo cual requiere una replantación inmediata.
Iris de la señora Dunford
Esta planta de floración temprana florece a mediados de abril. El arbusto alcanza una longitud de tan solo 10 cm. Debido a su pequeño tamaño, se puede plantar en macetas pequeñas. Tan solo un mes y medio después de la plantación, aparecen pétalos amarillos en las plántulas. Esta variedad presenta numerosas ventajas y características distintivas:
- tamaño miniatura;
- esterilidad de las yemas;
- ausencia de pétalos en la fila superior;
- Resistencia a las heladas y a la alta humedad.

La variedad es adecuada para cultivar en macetas en casa y en campo abierto.
Natasha
La variedad más resistente a las heladas de todos los tipos de iris. La altura del arbusto oscila entre 15 y 25 cm. Esta altura depende de las condiciones de cultivo, ya que es mayor en invernadero que en campo abierto. Este tipo de iris florece tardíamente, comenzando en la tercera decena de mayo y dura hasta 30 días, hasta que se produce una sequía severa. Durante el verano, los brotes de la planta se marchitan por completo y solo pueden rebrotar en la primavera siguiente.
Joyce
Una variedad única que sorprende a jardineros y aficionados por su apariencia y floración temprana. Los primeros brotes de lirios Joyce pueden verse brotar a partir de los 5-6 grados Celsius, después del deshielo. Esto suele ocurrir en marzo, pero en inviernos rigurosos, este proceso puede prolongarse hasta abril. Entre las características más notables de esta variedad se encuentran el hermoso color azul de su corola, de hasta 8 cm de altura, y su vigoroso crecimiento, que alcanza los 10 cm en poco tiempo. Crece en un mismo lugar durante un máximo de 4 años.

Yenín
La floración comienza en abril y dura más de un mes. La planta es un arbusto miniatura de hasta 15 cm de altura. El diámetro de la inflorescencia es de 6-8 cm. Tolera bien las heladas nocturnas y crece bien tanto en un arriate abierto como en macetas de interior.
Paulina
La variedad Pauline supera a otras variedades en atractivo. Su floración comienza a deleitar la vista ya en los primeros diez días de marzo. El bulbo es ovoide, ligeramente alargado, con una superficie carnosa cubierta de densas escamas. Las hojas alargadas de color verde brillante armonizan a la perfección con el tallo robusto y elegante, de hasta 25 cm de altura. La flor es morada, de aproximadamente 9 cm de diámetro.
¡Importante! No plantar antes de mediados de septiembre, ya que esta variedad no tolera bien las fluctuaciones de temperatura y requiere tiempo para establecerse.
Armonía
La temprana aparición de los brotes atrae la atención de muchos jardineros. La floración comienza a mediados de primavera, en cuanto remiten ligeramente las heladas nocturnas. Los brotes diminutos, de 1,5 cm de diámetro, cubren todo el arbusto. El bulbo tolera bien el invierno, ya que está cubierto de escamas resistentes que protegen el material de plantación de la congelación. Sus colores son cautivadores, desde el rojo, naranja, morado, amarillo, blanco nieve y azul. Con menos frecuencia, aparecen pétalos con colores bilaterales.

Plantación y cuidados en campo abierto
Antes de cultivar lirios reticulados, es importante familiarizarse con las reglas para plantarlos y cuidarlos en un jardín abierto para lograr los resultados deseados y disfrutar de sus encantadoras flores en primavera.
Selección del sitio y preparación del suelo
Antes de plantar, elija el sitio adecuado y prepare el suelo. Los lirios reticulados prosperan en suelos con un pH no superior a 6,8. Si el bulbo se coloca en un suelo demasiado ácido, la planta no florecerá y el arbusto alcanzará su tamaño máximo. En este caso, se recomienda añadir ceniza, tiza y cal al suelo. Un suelo seco y arenoso es el más adecuado para plantar.
¡Consejo! No se recomienda plantar en suelos pesados y ricos en minerales, ya que la planta crecerá lentamente en estas condiciones. Para un mejor crecimiento, puede enriquecer la zona con materia orgánica.

Esquemas y épocas de plantación de bulbos
La plantación de bulbos de iris reticulado suele realizarse en los últimos diez días del verano y continúa hasta mediados de otoño. No retrase este proceso, ya que la planta podría no establecerse correctamente y no sobrevivir. Para ello, cave el número necesario de agujeros, cada uno de 10 cm de profundidad, pero para bulbos más grandes, aumente la profundidad de los agujeros de 3 a 5 cm.
La distancia entre plantaciones debe ser de un promedio de 20 cm, aunque es posible menos. Sin embargo, plantarlas demasiado juntas ralentizará el crecimiento y la floración.
Riego y fertilización
El Iris reticulata requiere riego oportuno y una nutrición adecuada para asegurar un crecimiento y desarrollo vigorosos. Al regar, recuerde no mantener la tierra constantemente húmeda, ya que esto provocará la pudrición del sistema radicular y la muerte de la planta. Regar la planta 2 o 3 veces por semana con agua tibia es suficiente.
Los lirios reticulados son sensibles a los productos químicos, por lo que se recomiendan fertilizantes naturales. Para ello, se puede usar materia orgánica y, si es necesario, combinar compost, humus y ceniza.
La fertilización debe comenzar en el segundo año. También se recomienda aplicar fertilizante después de la floración, hacia finales del verano, ya que es el período en que la planta repone nutrientes y se prepara para el invierno.

Tratamientos preventivos
Los jardineros que llevan años disfrutando de la floración temprana de los lirios reticulados suelen encontrarse con enfermedades comunes. Para eliminar patógenos y plagas lo antes posible, es importante seguir medidas preventivas con regularidad.
Medidas preventivas contra enfermedades y plagas:
- regar la planta correctamente para proteger el cultivo de la bacteriosis;
- tratar con diversas preparaciones insecticidas para repeler insectos portadores de enfermedades;
- Desenterrar y aflojar la tierra, combinándola con amoníaco para neutralizar los grillos topo.
Para evitar infecciones bacterianas y fúngicas, es importante adherirse a todas las prácticas agrícolas y llevar a cabo rápidamente medidas preventivas adicionales utilizando sustancias naturales o sintéticas.
Guarnición
Cuando la parte aérea de la planta se seca, es necesario podarla. Para ello, se utilizan tijeras de podar o tijeras comunes.

Preparándose para la temporada de frío
Antes de que llegue el frío, se recomienda preparar la planta. Para ello, pode los arbustos y cúbralos con un material de cobertura especial. Puede usar paja, hojas secas o ramas de árboles como material de cobertura, extendiéndolas sobre el macizo de flores en una capa de 2 a 5 cm. Esto ayudará a absorber el exceso de humedad durante los deshielos y protegerá los bulbos de las heladas severas.
¡Consejo! Muchos jardineros recomiendan desenterrar y secar los bulbos de iris reticulado para evitar las manchas de tinta. Es importante guardar los especímenes desenterrados en un lugar fresco y seco.
Métodos de reproducción
Existen varios métodos para propagar lirios reticulados, pero muchos jardineros prefieren el método de semillas. Para ello, se necesita:
- Recoge los lirios maduros y extrae las semillas maduras.
- Colóquelos en una maceta pequeña y llénela con agua.
- Dejar en remojo durante 3 días y esperar hasta que broten.
- Plante la semilla en el suelo en otoño o primavera, cuando el suelo esté bien calentado.
- Las plántulas crecerán y comenzarán a florecer solo después de 2-3 años.

En ocasiones, los ejemplares cultivados a partir de semillas pierden sus características varietales, apareciendo nuevos rasgos distintivos.
Problemas y soluciones
El principal problema del cultivo de lirios reticulados es su falta de floración. Esta anomalía se produce con la plantación profunda, la congelación de los bulbos durante el invierno, la luz insuficiente y el crecimiento excesivo de las raíces. Los jardineros también se enfrentan con frecuencia a la podredumbre bacteriana y blanda y se preguntan cómo proteger sus flores de estas enfermedades. Esto requiere la aplicación oportuna de fertilizantes minerales a base de fósforo y potasio, y un aflojamiento regular de la tierra.
Para evitar problemas al cultivar lirios reticulados, elija un lugar con tierra rica en nutrientes; esto garantizará su desarrollo. Además, bríndele cuidados y atención, y le recompensará con una floración exuberante.











