El tomate Honey es una subespecie desarrollada específicamente para consumo fresco y cocinado. El gran tamaño de su fruto impide su conservación entera, pero es un excelente complemento para ensaladas salteadas o mixtas. Esta variedad fue desarrollada por un laboratorio ruso de fitomejoramiento específicamente para los cortos veranos de Siberia y el Lejano Oriente en 2004. Se registró en el Servicio Federal Ruso de Registro Estatal, Catastro y Cartografía en 2007 y ahora conquista con éxito los mercados agrícolas de Rusia y los países vecinos.
Condiciones de cultivo y parámetros varietales
Aunque esta variedad se desarrolló en Barnaul específicamente para su cultivo en invernaderos y semilleros, puede plantarse en prácticamente cualquier región. Ha tenido especial éxito en campo abierto en las regiones sur y central.

Las características y descripción de la variedad demuestran:
- sencillez y ausencia de técnicas de cuidado especiales;
- la capacidad de tolerar fácilmente olas de frío temporales y alta humedad;
- resistencia a enfermedades y efectos nocivos de los insectos;
- la posibilidad de almacenamiento a largo plazo en ausencia de fuentes de descomposición.
El tomate Honey es una variedad determinada de media estación. Se necesitan aproximadamente 110 días desde la siembra de las plántulas hasta la maduración de los primeros frutos.

El color es rosa. Cada tomate pesa 400 g, pero puede alcanzar hasta 500 g. El número de cámaras varía entre 5 y 6, con un contenido de materia seca del 5 %. El arbusto alcanza una altura de 1,5 m, por lo que requiere soporte con tutores o una espaldera horizontal. Los tomates, recolectados verdes, maduran bien en una habitación seca y oscura.
Si se siguen prácticas agrícolas adecuadas, se pueden cosechar de 3 a 4 kg de un solo arbusto. Quienes plantaron un máximo de 3 o 4 plántulas por metro cuadrado obtuvieron hasta 16 kg de una cosecha completa. Las plantaciones densas reducen la producción de fruta debido a la falta de luz solar.
Los tomates honey deben guiarse con uno o dos tallos. Este número mínimo de ramas garantiza un buen intercambio de gases. El aire no se estanca en el denso follaje. Esto reduce el riesgo de enfermedades fúngicas, especialmente durante los veranos lluviosos. Los invernaderos deben estar bien ventilados, evitando la humedad excesiva. Dado que las plantas son altas y los frutos grandes y macizos, los tallos deben estar bien atados.

Los jardineros que han cultivado esta variedad han notado su tendencia a romper los tallos. Durante la temporada de crecimiento, esta hortaliza responde bien a la fertilización oportuna. Los nutrientes orgánicos siempre deben predominar sobre los minerales en la mezcla general de fertilizantes. Estos nutrientes no deben ignorarse, como suele ocurrir con los jardineros naturales. El potasio y el fósforo son esenciales para el crecimiento saludable de las plantas.
Reglas para trasplantar plántulas y cuidarlas.
Las semillas de tomate miel deben sembrarse a finales de febrero o principios de marzo. La tierra preparada debe ser ligera, fertilizada y húmeda. Las semillas deben plantarse a una profundidad máxima de 1-1,5 cm. Los primeros brotes aparecen entre 7 y 10 días después de la siembra. Cuando aparezcan dos hojas verdaderas, trasplante o aclare las plantas, eliminando los brotes menos viables.
Durante el período de crecimiento de las plántulas, se requieren una o dos aplicaciones de fertilizantes líquidos orgánicos y minerales. Es recomendable alternarlos. Unas dos semanas antes de plantar en exterior, es necesario endurecer las plántulas. Esto refuerza significativamente su inmunidad, lo que repercute en el rendimiento general. Inicialmente, las plantas se exponen al aire fresco (pero no al frío) durante unos minutos y, posteriormente, durante unas horas al décimo día.

Si aparecen signos de enfermedad en las tomateras debido a un cuidado inadecuado, reduzca la cantidad de fertilizante nitrogenado y la intensidad del riego. Estas enfermedades son causadas por la proliferación de hongos debido a la alta humedad. Una buena ventilación puede ser eficaz.
Las verduras con un aroma agradable también atraen a diversos insectos. Las plagas suelen atacarlas durante condiciones climáticas extremas, cuando el sistema inmunitario está debilitado. En la región de Moscú y un poco más al norte, los principales enemigos de los tomates son los pulgones y los trips del melón.

En el sur la planta es atacada por:
- polillas de la manzana;
- mariposas blancas;
- moscas sierra;
- minador de hojas de solanáceas.
Para combatir estos parásitos se utilizan agentes químicos como Lepidocida o Zubr.

El tomate Honey, cuyo sabor impresionará a cualquier gourmet, se ha ganado el corazón de muchos jardineros aficionados y agricultores dedicados a la producción agrícola en masa. Estos tomates grandes, acanalados y con sabor a miel se han vuelto muy populares entre los consumidores. Las reseñas de la mayoría de los cultivadores indican que esta variedad prospera con la luz solar. Y cuanta más luz solar reciben los frutos, más dulces se vuelven.










