- ¿Por qué desenterrar gladiolos?
- Momento óptimo según la variedad y la región de cultivo
- Reglas básicas para desenterrar flores.
- Cómo y con qué tratar los bulbos para almacenarlos a largo plazo
- El secado
- Almacenamiento de bulbos
- Condiciones de almacenamiento
- En el apartamento en medias y bolsas.
- En el refrigerador
- En el sótano
- En la logia acristalada
- Cómo proteger los tubérculos de enfermedades y plagas
- Problemas y dificultades durante el almacenamiento
Los gladiolos son cautivadores por su belleza, pero la mayoría de los jardineros dudan en cultivarlos debido a las dificultades que conlleva el cuidado del material de plantación. Las técnicas de cultivo incluyen medidas durante la temporada de crecimiento y ciertos procedimientos otoñales que ayudan a preservar la flor ornamental hasta la temporada siguiente. Para asegurar que la planta adorne su parterre en el jardín o la dacha cada año, es necesario saber cuándo desenterrar los gladiolos antes de las heladas y también tener en cuenta las normas para conservar los bulbos durante el invierno.
¿Por qué desenterrar gladiolos?
Los jardineros aún debaten si es necesario desenterrar esta elegante planta para el invierno. En latitudes meridionales, las temperaturas rara vez bajan de cero, por lo que no es necesario retirar los tubérculos. Durante las heladas ligeras, basta con cubrir las plantaciones con film plástico, agrospan o una capa de hojas o serrín.
En las regiones centrales y del norte, con inviernos largos y helados, los tubérculos de flores pueden enfermarse y congelarse.
Por lo tanto, es esencial desenterrarlos y preparar adecuadamente los tubérculos para el almacenamiento invernal en casa.
El material de siembra de este cultivo también es susceptible a diversas enfermedades, especialmente a hongos patógenos. Incluso una hibernación bien controlada en el suelo no elimina el riesgo de infección, que solo puede prevenirse mediante la excavación y la clasificación.
Momento óptimo según la variedad y la región de cultivo
Al cultivar gladiolos, lo más importante es cosecharlos en el momento adecuado. Cosechar los bulbos demasiado pronto puede provocar que no germinen ni florezcan el año siguiente. Retrasar la cosecha puede provocar un clima frío y húmedo con cambios repentinos de temperatura, lo que puede provocar enfermedades y la muerte de los bulbos.
¡Importante! Se recomienda desenterrar los bulbos solo 40-45 días después de la floración.

El momento adecuado para cosechar los bulbos de gladiolos depende de la variedad. Empiece con las variedades más tempranas y vaya avanzando gradualmente hacia los gladiolos de crecimiento tardío. Es importante centrarse en las variedades de colores más oscuros, especialmente el morado, ya que esta variedad es susceptible a las infecciones por hongos debido a su débil sistema inmunitario. Desenterre los bulbillos que crecen en el vivero al final; necesitan tiempo suficiente para acumular nutrientes.
El momento de la recolección también puede variar según la región donde crezcan las hermosas flores. En climas templados, se recomienda recolectar las variedades tempranas a principios de septiembre y las tardías a finales de ese mes.
En latitudes meridionales, la cosecha debe realizarse de agosto a octubre, dependiendo de la variedad de planta y su período de floración. La clave está en no empapar demasiado los tubérculos. En Siberia, el clima permite el cultivo exclusivo de variedades tempranas, que tienen tiempo de crecer e impresionar con sus magníficas flores durante el corto período estival. Las plantas florecen en septiembre, justo antes de las primeras heladas. En las regiones del norte, desentierre los bulbos cuando las temperaturas diurnas bajen a 0 grados Celsius.
¡Consejo! Si las condiciones climáticas impiden que los bulbos se conserven en la tierra el tiempo necesario, pueden dejarse en el interior, en un lugar fresco, con el cepellón y las hojas, durante un mes, y solo entonces almacenarse, una vez preparados.

Reglas básicas para desenterrar flores.
La cosecha de los bulbos debe comenzar en un otoño cálido, soleado y seco. Con una pala, excave con cuidado la tierra alrededor de la planta y retire los bulbos por las hojas. Si están muy sucios, enjuáguelos con agua corriente y déjelos secar.
Luego toma las tijeras de podar y corta toda la masa vegetativa, dejando un tocón de 1,5 cm de tamaño.
Durante la excavación, cualquier bulbo con rizomas gravemente dañados debe destruirse inmediatamente. Este bulbo podría convertirse en una fuente de infección para los demás. Todos los tubérculos viejos también deben desecharse.
Cómo y con qué tratar los bulbos para almacenarlos a largo plazo
No es fácil conservar los tubérculos hasta la siguiente temporada de siembra, ya que son sensibles a los cambios de temperatura y humedad.

La tarea es factible si se siguen ciertas reglas:
- Antes de su colocación, el material debe enjuagarse con agua y tratarse con una solución no concentrada de permanganato de potasio.
- Luego coloque los tubérculos en bolsas de gasa, después de haberlos clasificado por variedad, y sumérjalos en un fungicida de contacto diseñado para tratar bulbos.
- Luego el material se seca.
No es necesario pelar los bulbos, ya que proporcionarán una protección confiable durante el almacenamiento.
El secado
El secado dura un promedio de dos meses. Para ello, los bulbos se clasifican en cajas de cartón individuales y se colocan en un lugar ventilado a una temperatura de 25 a 30 grados Celsius.
Después de 2 semanas, traslada los tubérculos a un lugar más fresco y mantenlos durante 1 mes a una temperatura de 20-21 grados.
Durante el período de secado, es importante voltear periódicamente los bulbos e inspeccionarlos para detectar signos de enfermedad. Si se encuentran bulbos infectados, retírelos de inmediato para evitar la infección de los tubérculos restantes.

Almacenamiento de bulbos
Una vez finalizado el secado, separe los bulbillos del bulbo. Antes de plantar, revise de nuevo si hay tubérculos dañados o enfermos. Es mejor colocar el material de siembra en bolsas de malla; son prácticas y permiten una ventilación de 24 horas.
También puedes utilizar una bolsa de papel, papel de periódico, malla de polietileno o medias de nailon.
Condiciones de almacenamiento
Los bulbos almacenados correctamente producen plantas sanas con largos periodos de floración y una descendencia vigorosa. Por lo tanto, es importante garantizar condiciones de almacenamiento favorables para los bulbos:
- indicadores de temperatura - de +2 a +9 grados;
- humedad del aire - 60 por ciento;
- un lugar oscuro para evitar que los tubérculos broten, ya que la luz acelera este proceso;
- Circulación de aire de alta calidad en la habitación; el aire estancado aumenta la probabilidad de crecimiento activo de moho.

Es importante crear estas condiciones, independientemente de la habitación elegida para almacenar la planta, ya sea un apartamento, un sótano o una bodega.
En el apartamento en medias y bolsas.
Al guardarlos en un apartamento en la ciudad, elija lugares con temperaturas entre 8 y 10 grados Celsius. Podría ser cerca de una ventana de madera o una puerta de balcón, un trastero sin calefacción o un área cerca de la puerta principal en el pasillo. Invernar los bulbos en arena seca dentro de una bolsa de plástico para evitar que se sequen. También puede colocarlos en bolsas de gasa o algodón. Si tiene muchos bulbos, envuélvalos en papel de periódico y guárdelos en cajas de cartón.
En el refrigerador
El estante inferior del refrigerador también se puede usar para almacenar, ya que tanto los bulbos como los bulbos pequeños se conservan bien hasta la siembra. Para ello, envuelva cada bulbo en papel para evitar que se seque y se arrugue, y luego colóquelo en una bolsa de plástico grande con agujeros. Las ventajas de este tipo de almacenamiento incluyen una temperatura y una humedad constantes. Es importante inspeccionar regularmente el material para detectar cualquier elemento enfermo.

En el sótano
Un sótano o bodega es el lugar ideal para almacenar gladiolos. Estos espacios deben mantener una temperatura estable de 4 a 8 grados Celsius, y la humedad no debe superar el 65-75 % para evitar la brotación prematura de los bulbos. Los recipientes de almacenamiento deben tener agujeros para permitir la libre circulación del aire.
¡Importante! Evite colocar gladiolos cerca de frutas y verduras, ya que evaporan rápidamente la humedad, lo que puede provocar la aparición de moho.
En la logia acristalada
Otra opción para proteger los bulbos y sus retoños en un apartamento es un balcón acristalado. Para evitar que el material se congele y mantener una humedad óptima, sumerja los bulbos en una mezcla de arcilla y agua. Después, séquelos de nuevo y colóquelos en cajas cubiertas con una manta.

Cómo proteger los tubérculos de enfermedades y plagas
Los gladiolos son susceptibles a infecciones y plagas durante el almacenamiento. Por lo tanto, requieren una inspección regular. Si se detectan insectos dañinos o infecciones fúngicas, se debe realizar lo siguiente:
- Quemar inmediatamente los tubérculos infectados.
- Los daños menores deben cortarse con un cuchillo y tratarse con verde brillante.
- Desinfecte todos los bulbos con fungicidas contra hongos e insecticidas contra diversos insectos dañinos. La solución de trabajo debe estar a una temperatura de 15 °C. Para obtener mejores resultados, sumerja los bulbos en la solución durante 30 a 40 minutos.
- Después del procedimiento de remojo, seque el material colocándolo en una habitación ventilada durante 1 o 2 semanas.
Para proteger los tubérculos, se pueden utilizar con fines preventivos los siguientes:
- Ajo. Coloque los dientes de ajo picados en recipientes junto con las cebollas. Reemplace los dientes secos por frescos. Esto evitará que plagas como los trips lleguen a los tubérculos.
- Parafina. Para ello, derrite la vela y coloca la mezcla resultante al baño maría. Sumerge cada bulbo en la parafina y luego en agua. Esto evitará que los bulbos pierdan humedad y los protegerá de los hongos.
Tratando adecuadamente los bulbos se pueden salvar incluso los ejemplares dañados, que luego se pueden utilizar para propagar el cultivo.

Problemas y dificultades durante el almacenamiento
Al almacenar los tubérculos pueden surgir las siguientes dificultades:
- El moho gris se desarrolla debido a la alta humedad. Es fundamental secar el material. No tire los bulbos mohosos; puede limpiarlos suavemente con una gasa empapada en vodka y secarlos. Esto no afectará la calidad de los tubérculos al plantarlos.
- Infestación de trips. Retire los tubérculos dañados y trate los restantes con productos químicos.
Si les da a sus bulbos la atención que merecen, los gladiolos le deleitarán con flores vibrantes y abundantes durante muchos años.











