- Características generales de la variedad Ethiopka
- Historia de la selección
- Regiones en crecimiento
- Pros y contras
- Apariencia del arbusto
- Características del feto
- Composición química y beneficios para la salud del melón
- Cómo plantar un cultivo en una parcela
- Tiempo
- Selección de un sitio teniendo en cuenta la rotación de cultivos
- Preparación de semillas
- Patrón y profundidad de siembra
- Organizamos el cuidado adecuado de las plantas.
- refugio temporal
- Riego
- Fertilizante superficial
- Formación de arbustos
- Aflojar y triturar el suelo
- Enfermedades de la variedad: prevención y tratamiento
- Mildiú polvoroso
- Antracosa o cabeza de cobre
- Cosecha y almacenamiento
- Reseñas de la variedad
La variedad de melón etíope, grande y dulce, fue desarrollada por cultivadores rusos. La planta se adapta perfectamente a nuestro clima. Su nombre deriva de su parecido con la fruta del África cálida. Los melones etíopes se cultivan en campo abierto donde la agricultura está desarrollada. En climas templados, se recomienda cultivar melones mediante plántulas.
Características generales de la variedad Ethiopka
El melón etíope, además de su apariencia inusual, se distingue por su excelente sabor, aroma ligero y facilidad de cuidado.
Historia de la selección
El nombre exótico de esta variedad podría hacer creer que el melón etíope proviene de climas más cálidos. Sin embargo, no es así. Los melones se cultivaban originalmente en Afganistán, India, Irán y otros climas más cálidos. Sin embargo, esta variedad en particular fue desarrollada por cultivadores rusos para su cultivo en climas templados.
Regiones en crecimiento
El cultivo de Etiopía es adecuado en todas las regiones donde se desarrolla la agricultura. En el sur, las semillas se siembran directamente en campo abierto, pero en la zona media y en los climas más fríos es mejor cultivar melones a través de plántulas. En los Urales y Siberia, las plantas dan frutos en condiciones de invernadero gracias a la posibilidad de autopolinización.

Pros y contras
Las ventajas de la variedad de melón etíope son:
- altas tasas de rendimiento;
- maduración temprana;
- capacidad de autopolinizarse;
- Excelentes características gustativas de los frutos, su contenido de azúcar;
- excelente aroma a melones;
- pulpa tierna y jugosa;
- Los frutos no se queman con el sol y son aptos para el cultivo al aire libre;
- buena resistencia a la sequía;
- Las plantas toleran bien condiciones de alta humedad;
- Excelentes cualidades comerciales;
- El cultivo es adecuado para el transporte a larga distancia;
- poco exigente en el cuidado.

El etíope no está exento de ciertas deficiencias:
- con falta de luz solar, las plantas crecen y se desarrollan mal;
- Si hay una ausencia prolongada de precipitaciones o riego, el sistema radicular del melón puede morir.
Apariencia del arbusto
La descripción de la variedad etíope indica que el arbusto tiene brotes cortos pero poderosos, lo que le da un aspecto compacto.
Características del feto
Los frutos de esta variedad de melón son redondos y pesan entre 3 y 5 kg. La piel es amarilla, gruesa y presenta un patrón reticular. La superficie del fruto parece estar dividida en segmentos por franjas.
La pulpa del etíope es blanca, jugosa y con un agradable sabor a miel.

Composición química y beneficios para la salud del melón
Gracias a su rica composición química, el melón etíope aporta enormes beneficios al cuerpo humano. La fruta contiene:
- potasio;
- fibra;
- cobre;
- ácidos orgánicos;
- vitaminas C, PP y B;
- vitamina C;
- ácido fólico.
Las personas con diabetes deben tener cuidado al comer melón, ya que contiene azúcar, que es absorbido rápidamente por el cuerpo.
Cómo plantar un cultivo en una parcela
La calidad y cantidad de la cosecha dependen de prácticas de plantación adecuadas, por lo que es importante familiarizarse con algunos de los matices del cultivo de melones etíopes de antemano.

Tiempo
En la zona de clima templado, los melones se cultivan mediante plántulas. Las semillas se siembran en macetas de turba o pequeños vasos a principios de abril. Las plantas se trasplantan al suelo cuando la temperatura alcanza los 10-15 °C y ha pasado la amenaza de heladas nocturnas. Esto suele ocurrir a mediados de mayo.
En las regiones del sur, las semillas se siembran directamente en campo abierto hacia mediados de abril.
Selección de un sitio teniendo en cuenta la rotación de cultivos
Los melones deben plantarse en una zona bien iluminada, protegida del viento y el frío. Evite plantarlos a la sombra. Prosperan en suelos francos con pH neutro. No crecen en suelos encharcados ni arcillosos. No se recomienda plantarlos cerca de pepinos o patatas. Los siguientes son los mejores vecinos:
- nabo;
- rábano;
- maíz;
- frijoles.

En cuanto a la rotación de cultivos, el comino etíope no debe plantarse en bancales previamente utilizados para tomates o zanahorias. Sin embargo, crece bien en zonas previamente cultivadas con:
- maíz;
- cebolla;
- ajo;
- legumbres;
- repollo.
Preparación de semillas
Antes de sembrar, las semillas de melón se remojan durante 24 horas en una solución de permanganato de potasio o ácido bórico a temperatura ambiente. Si no se dispone de estas sustancias, se puede usar ácido succínico. Este procedimiento aumenta la germinación. Las semillas que flotan a la superficie se descartan, ya que no producirán brotes.
Patrón y profundidad de siembra
Llene las macetas destinadas a plantar melones con una mezcla nutritiva de arena y turba en una proporción de 1:9. Siembre de 2 a 3 semillas en cada maceta a una profundidad de 20 mm. Coloque las macetas en un lugar cálido y bien iluminado. Los primeros brotes deberían brotar en una semana. Una vez que las plántulas hayan crecido, deje solo una, la más fuerte, en cada maceta.

Antes de plantar al aire libre, endurezca los melones durante 1 o 2 semanas. Al plantarlos en un huerto, separe los melones 60 cm entre sí y 75 cm entre hileras. Para entonces, la amenaza de heladas nocturnas debería haber pasado por completo.
Organizamos el cuidado adecuado de las plantas.
Para obtener una cosecha de melones dulces y aromáticos, las plantas requieren un cuidado adecuado, que incluye riego oportuno, fertilización y aflojamiento del suelo.
refugio temporal
Las plántulas requieren una cubierta temporal durante las primeras dos semanas después de la siembra para evitar quemaduras solares y permitir que las hojas se aclimaten. No hay requisitos específicos para el tipo de cubierta, pero es importante recordar que cuanto más gruesa sea la película, mayor será la temperatura bajo ella. Los melones también deben cubrirse de esta manera en regiones con primaveras frías.
Riego
El melón etíope requiere riego regular, que debe realizarse por la mañana o por la noche. Use agua calentada por el sol. Evite que las hojas de la planta se humedezcan. A los melones no les gusta el exceso de humedad, ya que puede pudrir la fruta.
Fertilizante superficial
La primera fertilización se realiza dos semanas después de plantar las plántulas en el huerto. Durante este período, se añade gordolobo o nitrato de amonio a la tierra bajo los arbustos. Cuando empiezan a formarse los brotes, se repite el proceso. Durante la formación del ovario, se añaden sales de potasio y superfosfato, siguiendo estrictamente las dosis recomendadas.

Formación de arbustos
Un entrenamiento adecuado del melón puede producir una cosecha más abundante. Inmediatamente después de plantar en campo abierto, corte el tallo principal para asegurar que toda su energía se dirija a la formación del fruto. En cada brote, además del principal, deje dos retoños y retire con cuidado el resto. Durante la formación del fruto, no deje más de cinco ovarios.
Aflojar y triturar el suelo
Después de cada riego o lluvia intensa, es necesario aflojar la tierra del bancal donde crece el etíope. Para evitar la evaporación excesiva de la humedad y el crecimiento de malezas, conviene cubrir con mantillo los espacios entre las hileras y la tierra entre los arbustos. El heno, el aserrín, la paja y las agujas de pino son buenas opciones.

Enfermedades de la variedad: prevención y tratamiento
La vid etíope posee una alta inmunidad a las enfermedades comunes, pero la resistencia disminuye si no se siguen las prácticas de cultivo. Para mantener las plantas sanas, es necesario realizar inspecciones regulares y tomar medidas preventivas de inmediato ante la primera señal de enfermedad.
Mildiú polvoroso
La aparición de pequeñas manchas blancas en tallos y follaje indica una peligrosa enfermedad llamada mildiú polvoroso. Si no se trata, las hojas se curvan y se secan. El mildiú polvoroso puede ser causado por una rotación inadecuada de cultivos, exceso de humedad o irregularidades en la temperatura. Para tratar la enfermedad, los melones se tratan con una solución de azufre inmediatamente después de detectar los primeros signos.

Tres semanas antes de la cosecha prevista, ya no es posible utilizar productos químicos en los bancales.
Antracosa o cabeza de cobre
La antracnosis se manifiesta por manchas amarillas o marrones en las hojas. Con el tiempo, el follaje se vuelve quebradizo, comienza a secarse y se cae. Esta enfermedad también provoca la deformación y pudrición del fruto. Al detectarse los primeros signos de la enfermedad, se eliminan todos los restos orgánicos alrededor de los melones y se trata el melón etíope con una solución de azufre o caldo bordelés. Estas medidas solo son eficaces en las primeras etapas de la enfermedad.
Cosecha y almacenamiento
La cosecha del melón etíope comienza en agosto. Los frutos maduros se recogen mejor en clima seco. Esta variedad se caracteriza por una maduración uniforme. El riego se suspende por completo una semana antes de la cosecha para que los melones adquieran su dulzura y prolonguen su vida útil. Las frutas maduradas en condiciones de excesiva humedad no se pueden almacenar durante más de 14 días.
Si el melón cosechado se va a almacenar, se deja el tallo con una longitud de unos 3 cm, en lugar de cortarlo directamente a la fruta, para evitar que se pudra. Los melones cosechados correctamente tienen una vida útil de no más de un mes. Los melones etíopes se utilizan no solo para consumo fresco, sino también para elaborar mermeladas, jaleas y otras delicias culinarias.

Reseñas de la variedad
Los jardineros y cultivadores de hortalizas ya han experimentado de primera mano todas las ventajas y desventajas de la variedad de melón etíope y están felices de compartir sus impresiones.
Dmitry Vladimirovich, un residente de verano novato:
Este año plantamos la variedad etíope por primera vez; antes, habíamos probado Titovka y Torpedo. La variedad nos llamó la atención por su aspecto inusual, que recordaba más a una calabaza. Es cierto que, dado el clima templado, no tuvimos que esforzarnos mucho para obtener una buena cosecha. Los frutos alcanzaron unos 3 kg de peso y eran fragantes. Sin embargo, personalmente, tuve sentimientos encontrados sobre el sabor. Estoy más acostumbrado al sabor clásico, y la etíope tiene un sabor bastante peculiar. Mi esposa y mi hija, sin embargo, quedaron encantadas.
Marina Sergeevna, jardinera experimentada:
Planto melones en mi jardín todos los años y cambio de variedad periódicamente. Este año experimenté con 'Ethiopka'. La descripción prometía frutos grandes, pero en mi jardín solo crecieron 1,5 kg. Sin embargo, el sabor era agradablemente meloso y la pulpa dulce y aromática. En un lugar soleado, la cosecha tardó 85 días en madurar. El año que viene volveré a plantar esta variedad y experimentaré con técnicas de cultivo; quizá consiga frutos más grandes.
Evgeny Alexandrovich, agricultor:
Cultivo melones con fines comerciales. Cultivo melones etíopes exclusivamente a partir de plántulas. Las plantas son fáciles de cultivar y la cosecha madura rápida y uniformemente. Los frutos son sabrosos, firmes y agradablemente aromáticos, y se transportan bien. La pulpa no es muy jugosa, pero es apta para todo tipo de procesamiento. De momento, estoy completamente satisfecho con esta variedad y sin duda la plantaré en mi jardín.












El melón etíope es delicioso y productivo, pero tiene una pega: no debe estar demasiado maduro; un melón completamente amarillo ya está demasiado maduro y su sabor es regular. El melón etíope debe cosecharse cuando apenas empieza a amarillear el lateral y huele a melón. Este melón es súper sabroso; la pulpa no está seca ni recuerda a la patata, y su sabor es excelente. Créeme, he comido bastantes melones etíopes.