- ¿Qué es un sharafuga?
- Híbrido de melocotón y albaricoque: ventajas y desventajas
- Historia de la selección
- Descripción y características
- Características de la madera
- Apariencia
- Dimensiones del sistema radicular y corona.
- ¿Quién es el polinizador?
- Floración y fructificación
- Periodo de maduración y cosecha
- El sabor de la fruta y su ámbito de aplicación.
- Variedades de la variedad
- Requisitos básicos para el cultivo
- Tecnología de plantación
- Preparación del sitio y de las plántulas
- Composición requerida del suelo
- Época y tecnología de siembra
- Cómo cuidar un cultivo híbrido
- Riego
- Fertilizante
- Aflojamiento y cuidado del círculo del tronco del árbol.
- Enfermedades y plagas: prevención y tratamiento
- ¿Necesito cubrirlo durante el invierno?
El cultivo de árboles frutales y de bayas depende de las características del cultivo elegido. Su cuidado puede ser complicado debido a que las variedades híbridas poseen diferentes propiedades heredadas de su fruta progenitora. El sharafuga es un híbrido que combina sabores de ciruela, melocotón y albaricoque. Esta singular fruta está ganando popularidad gracias a su sabor y su mayor adaptabilidad.
¿Qué es un sharafuga?
Nectacotum, o Sharafuga, se creó mediante un cruce complejo. Este híbrido posee altos índices de calidad, se puede cultivar en diversas ubicaciones y produce frutos de forma fiable.
Híbrido de melocotón y albaricoque: ventajas y desventajas
Las variedades híbridas suelen surgir dentro de una misma especie, pero el término sharafuga se refiere a experimentos de reproducción donde se cruzan diferentes especies de tipos relacionados. Ventajas de la hibridación:
- Excelentes características gustativas, combinando las cualidades del melocotón, la ciruela y el albaricoque;
- amplia gama de aplicaciones;
- mayores cualidades adaptativas;
- Alta resistencia a las heladas.
Las desventajas del sharafugi son las siguientes:
| Defecto | Característica |
| No produce material de semilla | La cría es complicada |
| Crece sólo en suelos fértiles. | Requiere alimentación constante |
| No tolera el riego excesivo. | Es necesario un control constante sobre el riego. |

Elegir plántulas puede ser un desafío para los jardineros. No todos los viveros tienen plántulas de Sharafuga. Además, el costo de estas plantas es bastante elevado.
Historia de la selección
El renombrado biólogo estadounidense F. Zeiger tardó 30 años en crear la Sharafuga. Creía que la subfamilia Plum podía producir un híbrido con cualidades únicas. Zeiger lo logró cruzando diferentes variedades de ciruela con melocotones, nectarinas y albaricoques.
Descripción y características
Las frutas Sharafuga se parecen a los albaricoques, con un color púrpura inusual. El diseño interior de la fruta, una vez deshuesado, es similar al de un melocotón. El sabor de la pulpa de la sharafuga se ha comparado con el de un melocotón, una ciruela o un albaricoque en diferentes etapas de maduración. El hueso es tan fácil de extraer como el de una ciruela.

Características de la madera
El árbol donde madura el sharafuga se parece a un ciruelo. Árboles de todas las variedades se parecen.
Apariencia
El árbol Sharafuga alcanza una altura de 2,5 metros. Crece entre 50 y 70 centímetros anualmente, con ramas que forman una copa semiovalada con hojas lanceoladas de color verde oscuro. La forma, el color y la disposición de las láminas de las hojas del Sharafuga imitan las características del ciruelo. En las ramas crecen espinas, también características del ciruelo. Las hojas comienzan a curvarse hacia adentro, una característica común en los albaricoqueros.
¡Información! Los arbustos de Sharafuga no ocupan mucho espacio; con una poda oportuna, pueden crecer en espacios reducidos.
Dimensiones del sistema radicular y corona.
El sistema radicular se forma como una raíz pivotante. La mayoría de las raíces se extienden hasta una profundidad de 20 a 40 centímetros. El tamaño de la corona depende del tipo de formación radicular. Con el cuidado adecuado, la corona adquiere una forma semioval, no se extiende lateralmente y ocupa poco espacio.

¿Quién es el polinizador?
Para asegurar el pleno desarrollo del árbol, se plantan albaricoques, ciruelas o nectarinas cerca. Se prefieren las variedades tempranas.
Floración y fructificación
El árbol comienza a dar frutos al tercer o cuarto año de su plantación. La floración se caracteriza por ser temprana y duradera. En regiones más cálidas, puede comenzar a finales de abril y durar hasta junio. Los frutos alcanzan la madurez para el consumo entre mediados y finales de agosto. La fructificación, con alimentación complementaria, se caracteriza por ser estable. Puede crecer en el mismo lugar hasta 15 años y producir una buena cosecha.
¡Información! A medida que cambian las características del suelo, los frutos del Sharafuga se hacen más pequeños.
Periodo de maduración y cosecha
Una característica distintiva de este híbrido es que se puede consumir en diferentes etapas de maduración. Cuando están técnicamente maduros, los frutos se asemejan a las ciruelas con un sabor ligeramente ácido; cuando están completamente maduros, se asemejan a los albaricoques. La piel es brillante, lo que significa que carece de la ligera pelusilla típica de los albaricoques.

La cosecha puede realizarse en cualquier etapa; el Sharafuga madura con éxito durante el almacenamiento. Gracias a su piel gruesa, los frutos son fáciles de transportar y tienen una larga vida útil.
El sabor de la fruta y su ámbito de aplicación.
Un solo fruto de sharafugi puede pesar hasta 70 gramos. Su pulpa se describe como agridulce. Su peculiar sabor a albaricoque y ciruela permite que la fruta se utilice de diversas maneras. Los jardineros señalan que los sharafugi son aptos para el consumo en fresco, así como para enlatar, elaborar mermeladas y compotas variadas.
Variedades de la variedad
En la América natal del sharafugi, se cultivan tres variedades, cada una con un color y un estilo de cultivo diferentes. El sharafugi amarillo es apto para el cultivo doméstico. El sharafugi morado se cultiva para el mercado de frutas.

Requisitos básicos para el cultivo
Cultivar sharafugi es similar al cuidado de ciruelos o albaricoqueros. La composición del suelo y el calendario de riego también son importantes. Estos árboles no toleran vientos fuertes ni suelos encharcados, por lo que es necesario seleccionar cuidadosamente el lugar de plantación.
Tecnología de plantación
Las pautas de plantación para las plántulas de Sharafuga incluyen la elección del lugar adecuado. El suelo para los híbridos se fertiliza con antelación: si se planta en primavera, se cubre con compost en otoño.
Preparación del sitio y de las plántulas
Al elegir un lugar de aterrizaje, guíese por las siguientes restricciones:
- Se excluyen los vientos pasantes;
- Se excluyen las tierras bajas con altos niveles de agua subterránea;
- No plantar en suelos pobres, empobrecidos y con baja acidez.

Una buena ubicación para el sharafugi es un lugar orientado al sur, protegido de edificaciones y con suficiente luz solar. Antes de plantar, remoje la plántula durante varias horas en un bioestimulante radicular. Antes de remojar, limpie el sistema radicular de cualquier suciedad o raíces dañadas.
Composición requerida del suelo
Al plantar sharafuga, preste mucha atención a la composición del suelo. La falta de nutrientes puede provocar una mala adaptación, debilitando la planta y haciéndola susceptible a diversas enfermedades.
El hoyo de plantación excavado previamente se fertiliza con materia orgánica, fertilizantes que contienen potasio y fósforo. El pH no debe superar los 6,5. Si es superior, es necesario aplicar cal.

¡Consejo! Para reducir la acidez del suelo, añada harina de dolomita o cal triturada.
Época y tecnología de siembra
Las plántulas de Sharafuga se plantan en primavera u otoño. La siembra en otoño es muy posible, ya que la planta es resistente a las heladas y se adapta a las bajas temperaturas.
Para la sharafuga, cave un hoyo de al menos 80 centímetros de profundidad y unos 70 centímetros de ancho. Fertilice el hoyo preparado con compost si es necesario. Coloque la plántula en el centro del hoyo, junto al soporte preparado. Cubra los lados con una capa de tierra y compáctela. Forme un círculo y riegue abundantemente. Durante la etapa inicial de adaptación, rocíe el tronco y los brotes jóvenes con agua tibia de un pulverizador y luego riegue la zona alrededor del tronco.

Cómo cuidar un cultivo híbrido
Con los cuidados adecuados, la Sharafuga puede crecer en un mismo lugar durante unos 15 a 20 años. El riego regular es esencial.
Riego
Al regar, asegúrese de que la capa superficial del suelo se seque uniformemente. El exceso de agua puede causar pudrición de las raíces. Durante las sequías, aumente la frecuencia de riego. Use de 10 a 15 litros de agua por planta adulta.
¡Advertencia! Utilice agua tibia para regar.
Fertilizante
Las características del cultivo híbrido requieren la aplicación adicional de varios tipos de fertilizantes.
- Antes de que se formen los brotes, el suelo se fertiliza con mezclas orgánicas.
- Cuando se forman los brotes, se añaden mezclas de nitrato de amonio y nitrógeno a las raíces (esto ayudará a aumentar la masa verde).
- Durante la formación de los brotes y al comienzo de la floración, se añaden mezclas de superfosfatos y potasio.
- Durante la formación del fruto, se añaden manganeso, calcio, potasio y selenio para estimular la maduración.
- Luego de cosechar los frutos se vuelve a fertilizar el suelo con materia orgánica.

Aflojamiento y cuidado del círculo del tronco del árbol.
El círculo del tronco se forma al plantarlo. Se expande a medida que el árbol madura. Si se desea, se puede cubrir con materiales especiales:
- agujas de pino;
- aserrín prensado;
- césped cortado.
Algunos jardineros prescinden del mantillo adicional; es necesario cuando es importante preservar y retener la humedad o evitar la propagación de malezas.
El aflojamiento se realiza independientemente de la presencia de una capa de mantillo. El aflojamiento airea el suelo, haciéndolo más ligero y más propicio para el crecimiento y desarrollo del sistema radicular subterráneo.

Enfermedades y plagas: prevención y tratamiento
La Sharafuga presenta una alta resistencia a enfermedades y plagas. Las medidas preventivas eliminan por completo los problemas durante el cultivo:
- En otoño y primavera se blanquea el tronco con una solución de cal;
- En otoño, se limpia el tronco de la corteza dañada, se quitan las hojas restantes y se queman;
- Si sospecha la aparición de insectos, realice un tratamiento foliar con una solución de cebolla o ajo.
¿Necesito cubrirlo durante el invierno?
El Sharafuga heredó del ciruelo la mayor resistencia a las bajas temperaturas. Puede sobrevivir inviernos a -30 °C sin sufrir pérdidas. Cuando sus brotes se congelan, el Sharafuga revive en primavera y empieza a formar brotes.
Para garantizar que el árbol sobreviva al invierno, se toman una serie de medidas para evitar que la planta se congele:
- el tronco se blanquea a 10-15 centímetros de la base;
- El círculo del tronco del árbol está aporcado;
- destruir ramas dañadas o enfermas.
Las heladas breves de hasta -35 grados no causarán ningún daño si la sharafuga está preparada adecuadamente.











