La incidencia de alergias al polen aumenta cada año en todo el mundo. Una de las malezas más peligrosas en este sentido es la ambrosía. Existe en docenas de variedades, pero la más común es la ambrosía común, Ambrosia artemisiifolia. Además de ser perjudicial para la salud humana, altera la vegetación de los cultivos, provocando pérdidas. Por lo tanto, es importante utilizar herbicidas específicos contra la ambrosía, una plaga compleja.
Características de las malezas
La ambrosía es una maleza de cuarentena que alcanza los 2 metros de altura y un sistema radicular que se extiende hasta 4 metros en el suelo. Se propaga por semillas, que pueden producir hasta 40.000 semillas en una sola planta madura. Presenta una notable resistencia a todos los métodos de control, lo que provoca una rápida propagación de la plaga.
Con siegas frecuentes, la ambrosía forma un arbusto más corto y ramificado, cuyos brotes comienzan a florecer a principios de junio y terminan en octubre. Durante este período, produce una gran cantidad de polen.
El daño que causa
La ambrosía provoca un tipo de alergia llamada fiebre del heno, causada por el polen. Debido a su fácil y rápida propagación y a su profusa floración, representa un riesgo para la salud, especialmente si crece cerca de zonas pobladas. Una concentración de tan solo cuatro granos de polen en el aire es suficiente para provocar una alergia.
Además de las enfermedades, la ambrosía causa problemas importantes a las plantas agrícolas y ornamentales. Sus potentes raíces absorben la humedad del suelo, privando de ella a los cultivos y plantaciones. Como resultado, las plántulas no pueden desarrollarse y las plantas perennes se ven privadas tanto de la humedad como de los nutrientes necesarios para producir una cosecha abundante y nutritiva.

Cómo controlar adecuadamente las malezas
Para erradicar esta plaga, se requiere un enfoque integral. Erradicar la ambrosía con métodos unilaterales es extremadamente difícil, si no imposible.
Efectos de los herbicidas
La ambrosía germina a partir de semillas más tarde que otras malezas, lo que dificulta enormemente el control de sus plántulas con herbicidas aplicados al suelo. Para los cultivos de cereales, los herbicidas a base de sulfonamida urea o 2,4-D son los más adecuados. Sin embargo, en el girasol, la soja y otras dicotiledóneas, el control de esta maleza es difícil.

Para ello es necesario utilizar los herbicidas más adecuados:
- "Impex Duo" (analógico - "Eurolighting").
- “Granadero (análogo – “Granstar”).
- "Helios" (Resumen).
- "Bazagrán".
- "Promex" y varios otros.
Si la ambrosía representa una amenaza real para los cultivos, es necesario utilizar varios tipos de herbicidas para lograr un efecto integral y prolongado.
Eliminación mecánica
Los brotes jóvenes de ambrosía deben arrancarse de raíz, ya que pueden regenerarse a partir de la yema restante. Las zonas con mucha vegetación deben segarse, ararse y tratarse con herbicidas para eliminar las plántulas en sus primeras etapas.

En zonas urbanas, cortar el césped con frecuencia es un método eficaz. Esto impide que la ambrosía crezca y alcance su etapa de floración.
Es mejor vigilar todas las áreas verdes para evitar que la maleza crezca sin control. La ambrosía puede invadir el jardín sin ser detectada y, dada la cantidad de semillas que produce, incluso un solo arbusto puede convertirse en una fuente de infestación generalizada.
Agentes biológicos
En los últimos años, se ha observado el uso incontrolado de pesticidas, especialmente en zonas residenciales, lo que ha provocado un aumento en el uso de fitoherbicidas y plantas que contienen fitoncidas. También se utilizan preparados especiales contra hongos y virus que atacan la ambrosía y otras malezas difíciles de eliminar, pero no afectan a los cultivos ni a las plantas ornamentales.

La introducción de métodos avanzados para la destrucción y control de la propagación de la ambrosía, junto con las técnicas químicas y agronómicas tradicionales, conduce a la limitación de la propagación de la plaga y su desplazamiento gradual.
Esto es especialmente importante en zonas donde las malezas obstaculizan el desarrollo agrícola y en proximidad a zonas pobladas, pequeñas o grandes.
¿Puede ser beneficiosa la ambrosía?
Algunos creen que la ambrosía solo se usa como embalsamador. En realidad, tiene muchos más usos. En Norteamérica, los nativos americanos usaban sus semillas como alimento, y sus fuertes fibras se usaban para hacer cuerdas.
También se utiliza en la medicina popular para reducir la fiebre, como análogo de la quinina, un fármaco antipalúdico, un fármaco antihelmíntico y una sustancia que reduce el picor de las picaduras de insectos.

Otra propiedad útil es su capacidad para extraer metales pesados, como el plomo, del suelo. Los arbustos cultivados se arrancan y se queman. El suelo purificado puede utilizarse para cultivos.
Prevención de ocurrencia
Para prevenir la propagación de la ambrosía, no basta con erradicarla sistemáticamente mediante métodos integrales. También es necesario evitar que se propague y se establezca en nuevas zonas.
Para ello, conviene sembrar terrenos baldíos, especialmente en zonas urbanas, con plantas perennes y césped. El corte regular del césped y la formación de una densa capa de césped y vegetación evitarán que las semillas de plagas germinen y se conviertan en plantas maduras.
Las áreas vacías se colonizan rápidamente por malezas, que pueden incluir esta peligrosa planta. Para evitar problemas de alergias y una mayor propagación de la plaga, es importante utilizar todos los métodos disponibles, con especial énfasis en el método menos riesgoso: el control biológico.











