El tomate Yaponka pertenece a un grupo de híbridos destinados al cultivo en invernadero. Sin embargo, muchos jardineros han aprendido a cultivar esta planta al aire libre. No es una variedad de tomate japonesa, ya que se cultivó originalmente en la región de Nizhni Nóvgorod. Se consume fresco y se utiliza para preparar salsas, sopas, ensaladas y jugos. Algunas personas conservan las bayas de Yaponka para el invierno.
Datos técnicos del híbrido
Las características y descripción de la variedad de tomate japonés son las siguientes:
- El período de vegetación del híbrido desde el momento de la siembra de las plántulas hasta la cosecha dura 110-115 días.
- La altura del arbusto de la planta oscila entre 170 y 190 cm en exterior. En invernadero, el tomatero alcanza una altura de 2 a 2,2 m. Los tallos presentan una cantidad media de hojas de color verde oscuro. El arbusto es bastante delgado, con poco crecimiento lateral.
- El híbrido tiene un solo racimo. Produce de 4 a 5 frutos en exterior. En invernadero, produce de 7 a 9 frutos por racimo.
- La forma de esta baya japonesa se asemeja a un corazón con la punta puntiaguda. El peso promedio del fruto oscila entre 0,3 y 0,5 kg. Las bayas maduras son rojas con un matiz frambuesa. Su sabor dulce se debe a su alto contenido en sacarosa.
- Los tomates tienen una piel fina pero densa.

Las reseñas de los agricultores que cultivan este híbrido indican que la variedad produce entre 3 y 5 kg de bayas por arbusto. Los jardineros señalan que la planta es inmune a la mayoría de las enfermedades de las solanáceas. Los frutos resultantes pueden utilizarse para producir semillas para la siguiente cosecha, pero solo si el agricultor sigue las prácticas de cultivo adecuadas.
Las desventajas del híbrido incluyen su alto costo y la limitada disponibilidad de semillas, ya que las granjas semilleras no las propagan. Estas solo se consiguen a través de recolectores.
Al cultivar un híbrido, sus arbustos se entrenan para formar uno o dos tallos. Debido a la altura del arbusto y a los grandes frutos que producen en las ramas, las ramas del tomate pueden romperse. Para evitarlo, los tallos se atan a espalderas o soportes. Otra desventaja del híbrido es la necesidad de eliminar los brotes laterales.

La japónica japonesa se cultiva al aire libre únicamente en el sur de Rusia. En las regiones central y septentrional, este híbrido se cultiva en invernaderos y semilleros. La planta es bastante fácil de cultivar, por lo que incluso un jardinero novato puede obtener una cosecha abundante.
Obtención de plántulas
La siembra de semillas en tierra especial se realiza después del 15 de febrero. El material de siembra se trata con jugo de aloe para desinfectar las semillas de hongos y bacterias. Las semillas deben remojarse en el jugo durante al menos 15 horas. No enjuague las semillas antes de plantarlas en la tierra.
La tierra debe estar suelta y ligeramente húmeda. Las semillas se plantan a 20 mm de profundidad. Se recomienda sembrarlas en macetas individuales. Riéguelas con agua tibia y luego cúbralas con film transparente. Los primeros brotes aparecen en 5-7 días.

Posteriormente, el recipiente con las plántulas se coloca bajo lámparas fluorescentes y la temperatura ambiente se mantiene entre +14 y +16 °C. Entre siete y nueve días después de la aparición de los brotes, la temperatura se incrementa entre 4 y 5 °C.
La tierra bajo las plántulas debe humedecerse con agua tibia mientras se seca. Fertilice las plantas 2 o 3 veces con fertilizantes minerales. Cuando las plántulas tengan 2 meses, se trasplantan a su ubicación definitiva en el invernadero. La proporción de plantación es de 3 a 4 plántulas por 1 m² de bancal.
Cuidado de los arbustos en crecimiento
Para mantener la humedad y la temperatura deseadas en el invernadero, este se ventila diariamente. Para mejorar la aireación de las raíces, se cubre con mantillo o rastrilla la tierra de los bancales. Este proceso acelera el crecimiento de las plantas y elimina el riesgo de enfermedades fúngicas.

Riega los tomates a medida que la tierra se seque. Si hace calor, aumenta la frecuencia de riego. Para rociar, usa agua tibia y sedimentada. Es mejor regar temprano en la mañana antes de que salga el sol.
Fertilice las tomateras en crecimiento cada 15 días. Use fertilizantes minerales y orgánicos. Antes de la floración, aplique mezclas ricas en nitrógeno. Tras la floración, aumente el contenido de potasio. Cuando aparezcan los primeros frutos, abónelas con fertilizantes ricos en fósforo y potasio.

Los hijastros se retiran semanalmente. Cuando los frutos empiezan a formarse en el racimo, se deben retirar todas las hojas. Las copas de los arbustos se podan en julio o agosto.
Desmalece los bancales cada 14-15 días. Este procedimiento elimina el riesgo de transmisión de enfermedades de las malezas a los cultivos.










