Muchos jardineros se preguntan por qué se secan las hojas de grosella negra y qué hacer al respecto. Los expertos recomiendan primero identificar la causa raíz del problema. Las hojas o brotes secos pueden deberse a un cuidado inadecuado, enfermedades o plagas. Para combatir el problema, es importante regar la planta con regularidad, aplicar fertilizante correctamente y tratar las plagas.
Las principales causas del secado de las grosellas negras y rojas
Hay muchas razones por las que los groselleros mueren. Si un arbusto se está muriendo, es importante actuar con prontitud.
Condiciones climáticas desfavorables
Si sus groselleros se han secado, podría sospechar que la causa son factores climáticos. La planta suele sufrir en climas cálidos y secos, siendo los arbustos jóvenes especialmente susceptibles. Si la planta tarda mucho en establecerse, aumente la cantidad de agua.
Riega la planta al atardecer, cuando el sol abrasador se pone. Evita usar agua de pozo o de pozo. El líquido está demasiado frío y dañará las raíces de la planta. Es mejor dejar que el agua repose al sol para que se caliente.
Se recomienda regar la planta abundantemente. Se deben verter al menos 1,5 cubos de agua debajo del arbusto. Esto es especialmente importante durante la maduración.

Las grosellas también pueden secarse por el exceso de lluvia. En este caso, conviene añadir tierra debajo del arbusto. Se recomienda crear zanjas de drenaje de al menos 60 centímetros alrededor de la planta. Esto ayudará a evitar el estancamiento de agua cerca de las grosellas.
Deficiencia de humedad
Julio y agosto pueden ser extremadamente calurosos. No es de extrañar que las grosellas se sequen en estas condiciones. Por lo tanto, la planta requiere abundante riego. Se recomienda regarla por la tarde, con agua sedimentada.
Enfermedades
Una causa común de problemas es el desarrollo de diversas enfermedades, que provocan que las hojas de la planta se sequen.

Tuberculosis
Si un grosellero se seca, se puede sospechar una enfermedad infecciosa. Las grosellas negras suelen ser las más afectadas por la tuberculosis. La enfermedad suele desarrollarse durante la floración. El envés de las hojas se cubre de protuberancias rojas. Para agosto, todas las grosellas se secan.
El proceso anormal comienza en la parte superior de las ramas, donde se cubren de protuberancias oscuras. Gradualmente, todo el árbol se ve afectado. En este caso, se deben eliminar las ramas secas e infectadas. Tras la cosecha, se debe tratar el arbusto con productos como Homecin o Topsin M. También se puede utilizar captanol.
Antracnosis
Esta enfermedad suele aparecer a mediados del verano. Se identifica por manchas de un milímetro de tamaño. Se distinguen por un tono marrón rojizo. Si no se trata, las manchas se agrandan y afectan a toda la hoja. Como resultado, la hoja se marchita, se seca y muere.
Los hongos causan la enfermedad. Viven en las hojas caídas y pueden sobrevivir al invierno. La infección luego se propaga a la madera. Por lo tanto, en primavera, es mejor retirar las hojas y tratar el arbusto con fungicidas. De lo contrario, la producción de bayas se reducirá significativamente.

Óxido columnar
Esta enfermedad provoca la aparición de pequeñas manchas anaranjadas en las hojas. Las grosellas pueden infectarse con coníferas. En este caso, es necesario actuar de inmediato. Para ello, trate los arbustos con fitosporina.
Si la sustancia no es eficaz, puede usar caldo bordelés al 1 %. El cultivo debe tratarse durante 4 días. Después, se recomienda un descanso de 10 días y repetir el tratamiento.
Plagas de insectos
Las plagas suelen dañar las hojas y ramas de las plantas. En este caso, el arbusto puede secarse por completo. Es importante identificar las plagas a tiempo, antes de que la planta muera.

Luciérnaga
Estos insectos son los más fáciles de detectar. Dañan las hojas y cubren las bayas con una densa red. Si examinas el arbusto con atención, verás orugas de color verde claro. Infectan los arbustos en plena floración.
Productos especiales como Iskra M y Actellic pueden ayudar a proteger las plantas. También se puede usar Fufanon.
Rocíe el arbusto antes de la floración. En otoño, se recomienda aporcar bien las plantas. Esto evita que las larvas lleguen a las grosellas.
Caja de cristal
Esta es una plaga peligrosa que ataca a los groselleros. Se identifica por el marchitamiento de las hojas. Las bayas se caen del arbusto y las hojas se encogen. El gusano de cristal comienza a infectar los groselleros desde el envés de las ramas. Cuanto más vieja es la planta, mayor es el riesgo de infección.

Si se encuentran ramas dañadas, deben cortarse y quemarse. La tierra alrededor del arbusto debe aflojarse regularmente, añadiendo polvo de tabaco o pimienta negra. La mostaza seca también se considera un remedio eficaz.
ácaro araña
Esta plaga afecta negativamente a las hojas de la planta, que quedan cubiertas de manchas blancas.
Con el tiempo, las zonas afectadas se agrandan y las hojas se secan. Posteriormente, las ramas de la planta también sufren.
Los ácaros araña provocan la propagación de diversas enfermedades, que pueden provocar la muerte total de la planta. Productos especiales para el control de plagas, como Karbofos y Fosfamida, pueden ayudar a controlar estas plagas.
Ácaro del riñón
Este insecto también puede causar la muerte de las plantas. Su principal peligro reside en la destrucción de las yemas. En consecuencia, la producción se reduce significativamente.

Los frutos maduran mal y tienen un sabor agrio. Las hojas son más pequeñas que las sanas y los pecíolos se alargan.
Pulgones y hormigas
Estos insectos suelen dañar los groselleros. Para identificar los parásitos, inspeccione cuidadosamente la tierra alrededor del grosellero. Si hay un hormiguero cerca, utilice una pala para moverlo a otro lugar.
En este caso, se recomienda rellenar el suelo con agua para ahuyentar las plagas.
La planta debe tratarse con una solución de ceniza. Para prepararla, use una taza de la solución por cubo de agua. Una solución jabonosa, a la que se le puede añadir mostaza en polvo, también es útil.
Otras razones
El secado de un arbusto puede ser causado por varios factores:
- Uso incorrecto de fertilizantes minerales. La deficiencia o el exceso de ciertos elementos provocan amarilleamiento y sequedad en las hojas.
- Riego poco frecuente. Cuando el agua es insuficiente, las raíces jóvenes mueren. Como resultado, la planta no recibe suficientes nutrientes, lo que provoca que el follaje se amarillee y se marchite. Después de un tiempo, comienza a caerse.
- Humedad excesiva. Regar demasiado la tierra pudre las raíces pequeñas. La planta no recibe suficientes nutrientes, lo que provoca que las hojas amarilleen y se caigan.
- Desarrollo de la mancha foliar causada por Septoria. Esta enfermedad provoca la aparición de manchas marrones en la planta. A medida que la enfermedad progresa, las manchas se aclaran y presentan un borde marrón. Cuando la enfermedad es grave, las hojas del grosellero se caen prematuramente. La enfermedad es causada por esporas de hongos que hibernan en las hojas caídas. Afecta no solo a las hojas, sino también al fruto.
- Mosaico de las nervaduras. Esta infección viral comienza a manifestarse después de la aparición de las hojas. Causa daños en las nervaduras. La enfermedad se acompaña de la aparición de un patrón amarillo en las hojas de grosella. Después de un tiempo, las hojas se secan y caen.

Normas de prevención
Para evitar daños a tu grosellero, necesita un cuidado adecuado. Primero, elige una ubicación adecuada. Es mejor plantarlo lejos de coníferas.
Además, se recomienda evitar el suelo estancado. En climas cálidos y secos, los arbustos requieren abundante riego. Es importante tener en cuenta que los insectos dañinos y las esporas de hongos pueden invernar en las hojas caídas. Por lo tanto, se recomienda retirarlos de la zona inmediatamente y quemarlos.
El tratamiento oportuno de los arbustos con insecticidas especializados es esencial para proteger el cultivo de insectos dañinos. Los fungicidas se utilizan para prevenir daños a las plantas causados por diversas enfermedades.
También es importante fertilizar las plantas adecuadamente. El nitrógeno se aplica a principios de la primavera. La urea es mejor si se aplica en forma líquida. En verano, las grosellas necesitan fertilizantes orgánicos.Para ello, se puede mezclar gordolobo con agua en una proporción de 1:10. En otoño, la planta requiere una mezcla a base de compost, sulfato de potasio y superfosfato.
Las grosellas pueden secarse debido a diversos factores. Los problemas surgen por un cuidado inadecuado de la planta. El desarrollo de enfermedades peligrosas y la proliferación de insectos dañinos en el cultivo también pueden causar problemas.
Para hacer frente al problema, es necesario proporcionar a la grosella el cuidado adecuado y realizar tratamientos preventivos de la planta.









