El tomate Scheherazade es una variedad poco común con hojas y frutos aterciopelados. Este tomate se caracteriza por su follaje vibrante, su forma exótica y su sabor excepcional.
Ventajas de la variedad
El tomate Sherazade debe su nombre de cuento de hadas a su inusual belleza y atractivo. La descripción de la variedad clasifica a esta planta semideterminada como un tomate de media temporada.

La maduración del fruto ocurre entre 115 y 120 días después de la germinación y continúa hasta septiembre. La variedad Scheherazade es resistente a las enfermedades virales y fúngicas de las solanáceas.
Dependiendo de las condiciones de cultivo, los arbustos alcanzan una altura de 100 a 150 cm. La planta se caracteriza por su follaje aterciopelado, muy desarrollado, de color verde esmeralda con un matiz azul.

El cultivo florece profusamente, formándose de 2 a 3 ovarios por racimo. La producción de tomate es media, con 1,5 a 2 kg de fruto por metro cuadrado. La planta es sensible a las altas temperaturas y a la luz solar directa.
La descripción de los tomates indica que su aspecto se asemeja al de un melocotón debido a la ligera pelusilla en la superficie de su piel gruesa. Al madurar, los frutos adquieren un color rojo anaranjado.
Tomates ovalados y cilíndricos con pulpa jugosa y carnosa. El peso del fruto puede variar entre 100 y 300 g. Tienen un sabor agradable y un aroma distintivo.
En la cocina, los tomates se utilizan frescos, para cocinar y para enlatar. Son excelentes para el transporte a largas distancias y conservan su sabor durante el almacenamiento prolongado.
La variedad Scheherazade ha recibido numerosas críticas positivas de los productores de hortalizas, quienes destacan el aspecto atractivo de sus tomates pequeños y esponjosos y la belleza y el aspecto exótico del arbusto durante toda la temporada de crecimiento.
Técnicas de cultivo
El tomate Sherazade se recomienda tanto para cultivo en campo abierto como en invernadero. La etapa más importante del cultivo es la preparación de las plántulas. Las semillas se siembran entre 55 y 60 días antes de la siembra.

Coloque las semillas en recipientes preparados, llénelos de tierra a 1 cm de profundidad y riéguelos con agua tibia con un pulverizador. Cubra el recipiente con film transparente hasta que broten los brotes.
Para formar plántulas sanas es necesario mantener las condiciones de temperatura y luz. El hecho es que la formación de las primeras inflorescencias se produce durante el período de aparición de la tercera hoja verdadera.
En este momento, las plántulas alcanzan una altura de 10 cm, por lo que la falta de luz puede provocar brotes florales débiles. Se recomienda aclimatar las plantas antes de plantarlas en el suelo.
A los 50-60 días de edad, las plántulas se trasladan a su ubicación definitiva en semilleros e invernaderos. Se plantan en campo abierto después de que pasen las heladas primaverales. Para ello, primero se preparan los hoyos, se añade humus y se riegan con agua tibia.
La profundidad del hoyo depende de la altura de las plántulas. Se recomienda plantar las plántulas hasta las primeras hojas. Las plantas muy alargadas se colocan en los hoyos hasta la segunda hoja, colocando cuidadosamente los tallos en círculo para promover el desarrollo de un sistema radicular secundario.

El cultivo de la variedad en terreno cerrado debe ir acompañado de un control de la humedad del aire y de la temperatura, de lo que depende la productividad del cultivo.
A medida que los arbustos crecen, elimine los brotes sobrantes. Para producir frutos grandes, se recomienda cultivar la planta con un solo tallo. Los arbustos son propensos a deformarse y romperse, por lo que deben sujetarse a un soporte.
El cuidado de la variedad Scheherazade implica riego regular y fertilización con fertilizantes minerales y orgánicos. Es necesario aflojar la tierra periódicamente para mantener el equilibrio hídrico y asegurar la aireación del sistema radicular.










