El deseo de una cosecha abundante lleva a los jardineros a adquirir costosos mejoradores minerales para el suelo, ya que los orgánicos, a pesar de todas sus ventajas, carecen de fósforo y potasio, factores que afectan directamente el crecimiento de las hortalizas. Sin embargo, los jardineros han descubierto un suplemento a base de harina de huesos, un fertilizante orgánico conocido por su rica composición química.
¿Qué es la harina de huesos?
La harina de huesos es un fertilizante que se obtiene procesando huesos de ganado o pescado. El fertilizante es un polvo de color claro, a menudo húmedo debido a cierta cantidad de grasa animal. La mezcla se produce de dos maneras:
- industrial - durante este tipo de producción, el producto se desinfecta de posibles infecciones, se priva de un olor específico y también, gracias a la calcinación, se desengrasa, lo que lo hace más homogéneo y más fácil de absorber por el suelo y las raíces;
- artesanal - este método de producción produce una menor cantidad de producto, pero de mayor calidad, sin posibles impurezas ni aditivos.
El polvo se vende en paquetes de diferentes pesos, pudiendo elegir el adecuado dependiendo del tamaño del área.
Tipos y composición química
La harina de huesos se obtiene a partir de espinas de pescado molidas, cuernos y pezuñas, caparazones de crustáceos y huesos de animales de granja. El contenido de potasio del esqueleto animal es bajo, pero suficiente para el crecimiento vegetal. Sin embargo, el producto contiene solo un 4 % de nitrógeno, por lo que requiere fertilizantes adicionales ricos en nitrógeno, como salitre o urea.
Además, el fertilizante contiene muchos otros micro y macroelementos útiles: calcio, hierro, magnesio, sodio, zinc, yodo, cobre, que son necesarios para el crecimiento saludable de las plantas.
Pero el elemento más importante enriquecido en la harina es el fósforo. Este influye en el crecimiento del cultivo y la fotosíntesis, así como en el sabor y la apariencia de la fruta. El fósforo también fortalece el sistema radicular y aumenta la cantidad de brotes fuertes.

Dependiendo de la tecnología utilizada para obtener la sustancia, el porcentaje de fósforo en la sustancia varía:
- harina regular procesada por molienda mecánica – 15%;
- cocido al vapor mediante tratamiento térmico – 25%;
- concentrado desgrasado – 35%.
La harina de pescado también contiene fósforo, calcio y hierro. Contiene dos veces y media más nitrógeno que la harina animal, lo cual beneficia el crecimiento de los cultivos. La harina de cuernos y pezuñas tiene un alto contenido de nitrógeno (aproximadamente un 10%). Sin embargo, este contenido de nitrógeno es seguro para las raíces, ya que se libera lentamente y no tiene tiempo de quemar los rizomas.

La harina de concha rara vez se encuentra en los estantes de las tiendas, pero tiene una lista de elementos igualmente beneficiosos para las plantas.
Beneficios de usarlo como fertilizante
Además de su rico contenido mineral, los huesos molidos tienen una serie de otros beneficios:
- seguridad para personas, animales, insectos y plantas;
- limpieza ecológica;
- bajo costo en comparación con los fertilizantes minerales;
- descomposición lenta: alrededor de 8 meses, lo que significa usarlo una vez por temporada;
- no deja quemaduras en las hojas de los cultivos;
- La harina de huesos es un fertilizante listo para usar y no requiere pasos adicionales como dilución, mezcla o infusión;
- La preparación es adecuada tanto para uso doméstico como para uso en el jardín;
- utilizado durante cualquier temporada de crecimiento;
- se puede utilizar inmediatamente antes de la cosecha;
- El fertilizante no tiene un olor fuerte ni desagradable.

¿Para qué se utiliza la harina de huesos?
Los huesos molidos se pueden usar como fertilizante orgánico tanto para plantas de interior como de jardín. Esta sustancia es ideal para suelos muy ácidos, ya que su composición normaliza el equilibrio del suelo, lo enriquece y ayuda a las raíces a absorber los nutrientes.
Además, la harina es un excelente fertilizante antes de plantar una nueva planta, ya que el fósforo ayuda a que las raíces se arraiguen en la nueva ubicación. El producto también influye en el crecimiento y el rendimiento de la cosecha, así como en el sabor y la apariencia de la fruta.
Además, la sustancia refuerza la inmunidad de las plantas contra diversos tipos de hongos, infecciones y plagas. Los jardineros también suelen espolvorear el polvo sobre el césped, lo que lo hace más denso y con un color más intenso. Las semillas molidas pueden usarse puras o añadirse a mezclas preparadas para compensar la deficiencia de nitrógeno.

Normas de aplicación e introducción
Periodos de alimentación con harina de huesos:
- inmediatamente antes de la siembra de primavera, en los hoyos de plantación (10-15 gramos por planta);
- Durante la excavación de otoño, esparza el polvo a razón de 100-200 gramos por metro cuadrado; si no se excava el suelo, los huesos molidos deben compactarse en el suelo, más cerca de las raíces.
El uso de harina de huesos en otoño se considera más eficaz porque los nutrientes se descompondrán al estado necesario antes de la primavera, lo que permitirá que las futuras plantas los aprovechen. La harina de huesos se suele aplicar una vez al año, aunque los jardineros experimentados recomiendan no aplicar el fertilizante más de una vez cada tres años.

Dependiendo de los cultivos que crezcan en el jardín, el preparado se utiliza de diferentes maneras:
- Para las plantas vegetales, se debe aumentar la cantidad de sustancia añadida en primavera: 50 gramos en cada hoyo, en otoño se mantienen las proporciones;
- En el caso de las patatas, es mejor aplicarlo durante la excavación otoñal, ya que fertilizar cada hoyo es un proceso largo. La dosis recomendada en otoño es de 200 a 300 gramos por metro cuadrado.
- Para los rosales, se deben agregar 100-150 gramos a cada hoyo al plantarlos; para plantas maduras, se deben agregar 100 gramos a la zona de la raíz, seguido de acolchado una vez cada 3 años;
- Para las fresas, el fertilizante se aplica tanto durante la plantación (20-30 gramos por hoyo o 300 gramos por metro cuadrado) como durante el período de floración o fructificación (10-20 gramos);
- Para arbustos de bayas o árboles frutales, se necesitan 100-150 gramos de harina en cada agujero;
- Para las plantas de interior, mezcle la harina con la tierra a razón de 1 gramo por kilogramo de tierra.

¿Cómo obtener harina de huesos?
También puedes preparar tú mismo un fertilizante saludable. Para ello, necesitarás abastecerte de alimento para animales o peces y tener mucho tiempo libre, ya que preparar harina es un proceso lento y laborioso, sobre todo sin el equipo necesario. Además, recuerda que el proceso produce un olor característico, así que es mejor hacerlo al aire libre.
Hay varias formas de obtener el producto, pero las siguientes son las más sencillas:
- La materia prima debe lavarse bien, trocearse y hervirse en una sartén de hierro fundido hasta que se ablande por completo. Tras enfriarse, el producto debe molerse.
- Deje la materia prima preparada sobre brasas ardientes hasta que el hueso se pueda desmenuzar con las manos.
Puedes moler el producto terminado usando una licuadora, un rodillo o un triturador de granos.
Almacenamiento de productos
Guarde el fertilizante fuera del alcance de niños, roedores o pájaros, alejado de la luz solar directa y en un lugar bien ventilado. Asegúrese de respetar las fechas de caducidad indicadas en las etiquetas. La harina casera debe envasarse en bolsas de tela y almacenarse como la harina comercial.











