- Enfermedades del nabo y su tratamiento
- Podredumbre blanca
- Podredumbre gris
- Esquirol
- Mosaico
- Kila
- Bacteriosis vascular
- Peronosporosis
- Mildiú polvoroso de las plantas crucíferas
- Plagas del nabo y métodos de control
- Polilla de la col
- El gusano cortador
- Gusanos de alambre o escarabajos chasqueadores
- Nematodo del tallo
- Mosca de la col de verano
- Mosca de la col de primavera
- Mariposa blanca del nabo
- Escarabajos pulga crucíferos
- mariposa de la col
- Cómo prevenir las plagas
- Cómo evitar enfermedades
Las plagas son una frecuente compañera de los nabos, y pueden surgir problemas como resultado de un cuidado inadecuado y la falta de preparación previa a la siembra. Las enfermedades y plagas suelen dañar no solo las partes aéreas de la planta, sino también las raíces, lo que afecta negativamente la producción. Ante la primera señal de enfermedad, es importante aplicar tratamientos especiales para prevenir una mayor infestación.
Enfermedades del nabo y su tratamiento
Las enfermedades del nabo suelen reducir la producción. Las hojas amarillean y se caen, la raíz apenas se desarrolla y el sabor se deteriora. El cultivo puede verse afectado por una amplia gama de enfermedades, entre ellas las siguientes.
Podredumbre blanca
Esta enfermedad fúngica se manifiesta como una capa blanca en los tallos y raíces. Como resultado, la planta queda inundada y muere rápidamente si no se trata. El tratamiento consiste en espolvorear la planta con tiza y rociarla con sulfato de cobre. La zona afectada se corta y se elimina.
Podredumbre gris
La enfermedad se produce debido a un cuidado inadecuado o a la presencia de malezas, que actúan como agente causal. El problema se manifiesta como una placa en las raíces, que provoca pudrición. Puede desarrollarse un olor desagradable en la zona. El tratamiento consiste en rociar con sulfato de cobre y espolvorear con ceniza.
Importante: El moho gris puede aparecer en los cultivos cosechados como resultado de un almacenamiento inadecuado y una humedad alta.
Esquirol
Este tipo de enfermedad es incurable. Aparece como una mancha negra en el nabo al cortarlo. La mancha se agranda gradualmente y daña completamente la raíz. La enfermedad es causada por material de siembra de mala calidad.
Mosaico
La planta crece despacio, los arbustos son pequeños y las raíces están poco desarrolladas. Aparecen patrones borrosos en las hojas. Se utiliza una solución de "Karbofos" para eliminarla. Se eliminan las partes dañadas de la planta.
Kila
El problema se manifiesta en forma de crecimientos en las raíces. Estos se agrandan gradualmente, provocando la muerte completa de la porción radicular. Se eliminan los arbustos dañados y se trata la zona de cultivo con una solución diluida de permanganato de potasio.

Bacteriosis vascular
La enfermedad se manifiesta con el amarilleo de las hojas y su desecación gradual. Se propaga a través del material de siembra y, por lo tanto, no tiene cura. Las plantas afectadas se eliminan. Para evitar problemas, nabos en crecimiento Es necesario seguir medidas preventivas y procesar con cuidado el material de siembra.
Peronosporosis
La enfermedad afecta a todas las partes de la planta. Se forman manchas amarillas en las hojas, que se agrandan gradualmente y provocan el amarilleo y la caída de las partes aéreas. En los nabos, se forman manchas negras que, al agrandarse, provocan la pudrición.
Para prevenir la enfermedad, controle la humedad del suelo y aflójelo regularmente. Si aparecen síntomas, rocíe con caldo bordelés o cloruro de cobre.
Mildiú polvoroso de las plantas crucíferas
Con mayor frecuencia daña las plántulas. Los síntomas se manifiestan como una capa blanca y suelta. La enfermedad provoca que las hojas se amarilleen y se sequen. Los tubérculos infectados son susceptibles a la pudrición y no pueden almacenarse durante largos periodos. Para prevenir la enfermedad, se deben tratar las semillas antes de plantarlas. Para eliminar los primeros síntomas, rocíe con caldo bordelés.

Plagas del nabo y métodos de control
Los nabos pueden ser atacados por plagas que no solo dañan las hojas, sino que también inutilizan la raíz. Para combatir las plagas, es necesario saber cómo tratar el cultivo.
Polilla de la col
Estas larvas se alimentan de las partes verdes de la planta, así como de la pulpa de la raíz. Son pequeñas y verdes, lo que dificulta su detección temprana. Se utilizan insecticidas como Eurodim y Akiba para controlar los gusanos cortadores. Se debe volver a pulverizar la planta 14 días después del tratamiento inicial.
El gusano cortador
Un insecto parecido a una polilla. Aunque inofensivo para los nabos, pone huevos que se alimentan de las hojas. Las infestaciones extensas de larvas dañan las raíces y causan daños considerables al cultivo. Se utilizan insecticidas para controlar los nabos, lo que requiere regar no solo el arbusto, sino también la tierra que los rodea.

Gusanos de alambre o escarabajos chasqueadores
Estas son larvas de escarabajos que se alimentan de nabos y excavan en la pulpa, dañando así el cultivo. Las orugas son pequeñas y pueden migrar a plantas sanas. Esta plaga se encuentra típicamente en el césped. Para eliminarla, rocíe con permanganato de potasio o una decocción de cáscara de cebolla. También se recomienda la labranza profunda antes de plantar, ya que los huevos de escarabajo pueden almacenarse en el campo.
Nematodo del tallo
La plaga es blanca, similar a un gusano, y puede pasar desapercibida para los jardineros. El gusano tiene una porción estrecha llamada lanza. Utilizando esta porción, daña las células vegetales, causando la muerte de la pulpa y las partes aéreas. Los gusanos se alimentan tanto de raíces como de hojas, lo que a menudo provoca la muerte completa de los nabos.
Cuando se infectan, los nabos retrasan su crecimiento y aparecen manchas duras en los tallos y las raíces. La raíz se deteriora gradualmente y la verdura infectada no puede almacenarse. La infección se produce con el material de siembra, por lo que es necesario tratar las semillas con un insecticida o una solución de manganeso para prevenirla. La detección temprana de la plaga ayuda a preservar la cosecha.
Mosca de la col de verano
Este tipo de plaga aparece a finales de junio. Los mosquitos se instalan en la planta y ponen huevos en el suelo. Las larvas emergen en 7 días, dañando las raíces y las hojas. Las larvas pueden desplazarse por el suelo e infectar plantas sanas. Si se encuentran agujeros en el nabo al cortarlo, esto indica una infestación. El tratamiento consiste en rociar con Karbofos y Topaz, y espolvorear con ceniza de madera también se considera eficaz.

Mosca de la col de primavera
La mosca es gris y se parece a una mosca común. Pone huevos que dañan las raíces y provocan la muerte del cultivo. Los nabales se pueden salvar espolvoreándolos con ceniza o polvo de tabaco. Un material de siembra bien tratado también es crucial. Después de la cosecha, labre profundamente la zona y aplique fertilizante orgánico.
Mariposa blanca del nabo
La polilla es pequeña, de hasta 45 mm de longitud. Emerge a mediados de mayo y pone huevos en las plantas, de los cuales eclosionan las larvas. Estas se alimentan de hojas, pero en algunos casos pueden dañar las raíces. Para eliminar la plaga, los jardineros riegan los cultivos con agua mezclada con insecticidas, ya que la mayoría de las larvas pueden estar en el suelo. También se utiliza la recolección manual.
Escarabajos pulga crucíferos
Los insectos son muy pequeños, por lo que pasan desapercibidos cuando están infestados. Los primeros signos de la plaga son numerosos agujeros en las hojas. Los escarabajos pulga se pueden controlar con polvo de tabaco, ceniza y una solución de jabón para ropa. Los arbustos se tratan cada 10 días.

mariposa de la col
Esta plaga se conoce comúnmente como grillo topo. Este insecto daña las raíces de las plantas carcomiendo la pulpa, provocando su muerte. Los primeros signos de infestación son el debilitamiento de la planta y la presencia de túneles en el suelo. Para eliminar la plaga, se vierte veneno en los túneles. También se pueden usar trampas de botella para controlarla.
Importante: El grillo topo tiene alas, por lo que puede moverse por cualquier lugar de la propiedad.
Cómo prevenir las plagas
Para reducir el riesgo de ataques de plagas en los nabos, siga estas recomendaciones:
- Excave el suelo a fondo no sólo en otoño, sino también a principios de primavera;
- no permita que las malas hierbas aparezcan en grandes cantidades;
- Tratar las zonas de aterrizaje con un antiséptico;
- Si nota que las hojas desarrollan agujeros, utilice productos químicos para controlar las plagas;
- utilizar remedios caseros contra insectos dañinos, por ejemplo, plantar ajenjo o espolvorear el suelo con ceniza;
- Elimine los gusanos de los nabos de manera oportuna utilizando productos químicos especiales.

Tras la cosecha, queme las hojas restantes y las raíces dañadas. Cubra la zona con virutas de madera o agujas de pino.
Cómo evitar enfermedades
Una preparación adecuada del material de siembra puede proteger a las plantas de posibles enfermedades. Las semillas deben tratarse con un antiséptico antes de plantarlas. El suelo también debe tratarse con una solución de manganeso y regarse antes de plantar. Es importante seleccionar únicamente semillas pretratadas que estén libres de cepas de enfermedades.
Para evitar que los nabos se vuelvan susceptibles a las enfermedades, es necesario seguir las reglas de rotación de cultivos y enriquecer el suelo con todos los componentes beneficiosos para fortalecer la inmunidad del cultivo.
Los nabos son una verdura de raíz saludable que se usa en la cocina. Contienen una gran cantidad de vitaminas y pueden usarse para tratar enfermedades. Sin embargo, al plantarlos, es importante examinar cuidadosamente el estado del material de siembra y eliminar las plagas de inmediato. De lo contrario, la cosecha podría perderse y las raíces infectadas no se conservarán bien y perderán su sabor.











