- ¿Cuáles son los beneficios de los arándanos rojos?
- Cómo clasificar rápidamente su cosecha
- Limpieza sobre una superficie rugosa
- Tamizando en el viento
- Usando una aspiradora
- Usando una malla ancha
- Cómo almacenar arándanos rojos frescos
- Contenedores de almacenamiento
- Condiciones y duración del almacenamiento de las bayas
- Fecha de caducidad del producto
- Dónde almacenar arándanos rojos en casa
- Almacenamiento en sótano o bodega
- En la habitación
- En el refrigerador o congelador
- Cómo preparar arándanos rojos para el invierno
- En forma de mermelada
- Arándanos rojos remojados en agua
- Congelación
- Almacenamiento de arándanos rojos en azúcar
- Secado de bayas
- Preparaciones en almíbar
- Enlatado en su propio jugo
Los arándanos rojos, una baya agridulce rica en vitaminas, se almacenan y conservan durante el invierno mediante diversos métodos. Las propiedades beneficiosas de esta belleza de la taiga, que crece en un arbusto bajo, se pueden apreciar. Se clasifican y limpian los frutos cosechados mediante diversos métodos. Se conservan sus propiedades beneficiosas mediante el secado, la congelación, la elaboración de mermeladas y otros métodos de conservación. Se pueden almacenar bayas frescas y enlatadas en casa.
¿Cuáles son los beneficios de los arándanos rojos?
Las propiedades beneficiosas del arándano rojo se conocen desde tiempos inmemoriales. Esta baya es rica en vitaminas, micro y macroelementos, minerales y otras sustancias beneficiosas.
Las frutas frescas, las decocciones y las infusiones se utilizan para diversas dolencias. Son beneficiosas para la diabetes, por su alto contenido de cobre, la gota (reduce los niveles de ácido úrico) y la cistitis. Externamente, son útiles para el dolor de garganta, la sarna, las úlceras y la tiña.
El arándano rojo es beneficioso para la baja acidez, la hipertensión y la fiebre, ya que potencia el efecto de los antibióticos y ayuda a recuperar las fuerzas tras una enfermedad prolongada. También ayuda a eliminar metales pesados del organismo. Fortalece el sistema inmunitario y ayuda a prevenir resfriados.
Cómo clasificar rápidamente su cosecha
Tras cosechar una gran cantidad de fruta, quizás se pregunte cómo limpiarla de tantos residuos. Existen varios métodos de limpieza eficaces. La elección dependerá del grado y tipo de contaminación de la fruta cosechada.
Limpieza sobre una superficie rugosa
Para eliminar los residuos de la fruta cosechada, cree un canal inclinado. Cubra el fondo del dispositivo con un paño áspero y deje rodar las bayas por el canal en pequeñas porciones. Al limpiar, los residuos permanecerán en la superficie del paño y la fruta rodará hacia un recipiente.

Tamizando en el viento
Este método de limpieza es adecuado para condiciones de viento. Coloque un recipiente amplio en el suelo y eleve un recipiente pequeño con la fruta cosechada a aproximadamente un metro y medio de altura. Comience a verter la fruta en pequeñas porciones. El viento arrastrará los restos y las bayas limpias caerán en el recipiente preparado.
Usando una aspiradora
Las bayas secas se pueden aspirar rápidamente. Coloque una pequeña cantidad de fruta en un colador y dirija el flujo de aire desde abajo. Conecte la manguera de aspiración al puerto de escape.
Usando una malla ancha
Al recolectar arándanos rojos en el bosque, no solo ramitas y hojas pequeñas, sino también arena y partículas de tierra acaban en el recipiente. Esta contaminación se puede eliminar con una red ancha. Colóquela en ángulo, coloque film transparente debajo o un recipiente grande debajo y vierta lentamente las bayas.

Cómo almacenar arándanos rojos frescos
La conservación de las vitaminas y otras propiedades beneficiosas de las bayas depende del lugar y el método de almacenamiento. El agua filtrada, con o sin azúcar, ayudará a mantener las bayas frescas. Remojar los arándanos rojos es una buena idea. De esta manera, conservarán sus vitaminas y sabor.
Las frutas azucaradas que no han estado expuestas a altas temperaturas se pueden conservar en el frigorífico durante bastante tiempo.
Si las bayas no están maduras, no se recomienda su consumo. Las frutas recolectadas demasiado pronto tienen un sabor amargo. Los arándanos rojos verdes se extienden sobre una hoja cubierta con papel vegetal y se sacan al balcón. Maduran en pocos días.

Contenedores de almacenamiento
Al elegir recipientes para almacenar, lo mejor es optar por un recipiente de madera o una cesta de mimbre. Los recipientes de vidrio y las bolsas de papel también son adecuados.
Condiciones y duración del almacenamiento de las bayas
Gracias a su alto contenido de antioxidantes, los arándanos rojos tienen una larga vida útil y son resistentes a la putrefacción. Por ejemplo, los arándanos almacenados en una cesta de mimbre pueden durar dos meses en un lugar fresco.
Fecha de caducidad del producto
La vida útil del producto depende del método de preparación y del lugar de almacenamiento de las bayas.
- Los arándanos rojos en su propio jugo se pueden conservar hasta siete meses.
- Las frutas congeladas se pueden conservar durante un año.
- Las bayas no pueden permanecer en la habitación durante más de diez días.
- Los arándanos rojos remojados se pueden conservar en el refrigerador durante doce meses.

Dónde almacenar arándanos rojos en casa
Tras cosechar arándanos rojos a finales del verano, muchas personas desean conservar su sabor y valor nutricional por más tiempo. Esto se puede lograr siguiendo unas sencillas reglas para almacenar la fruta en casa.
Almacenamiento en sótano o bodega
Para almacenar arándanos rojos en una bodega o sótano, mantenga una temperatura óptima de entre tres y cinco grados Celsius. Los arándanos enteros e intactos se colocan en una cesta o caja de madera. En estas condiciones, se conservan durante tres meses.
En la habitación
Los arándanos rojos frescos se conservan durante diez días en interiores, siempre que la temperatura ambiente no supere los 25 grados Celsius. Lava los arándanos, sécalos con una servilleta y colócalos en una cesta.

En el refrigerador o congelador
Las bayas se conservan en el refrigerador durante aproximadamente un mes. Para ello, retire las bayas demasiado maduras o dañadas. Lave los arándanos rojos y séquelos con un paño de cocina. Colóquelos en un recipiente, ciérrelo y guárdelos en el cajón de las verduras. Al congelar las bayas, sepárelas en bolsas adecuadas para que se puedan usar todas a la vez y no sea necesario volver a congelarlas. Las bayas congeladas se conservan hasta un año.
Cómo preparar arándanos rojos para el invierno
Conociendo los beneficios de los arándanos rojos, muchas amas de casa se abastecen de esta baya rica en vitaminas para el invierno. Hay varias maneras de conservarlos.
¡Atención! Las bayas deben recolectarse únicamente en zonas ecológicamente limpias, alejadas de las carreteras, ya que tienden a absorber sustancias nocivas y pueden volverse tóxicas.

En forma de mermelada
Una forma fácil de conservar arándanos rojos es hacer mermelada al estilo clásico.
Productos necesarios:
- 900 gramos de arándanos rojos;
- 1100 gramos de azúcar granulada;
- 200 mililitros de agua.
Lave las bayas enteras y bien maduras con agua corriente y déjelas reposar unos minutos para eliminar el exceso de humedad. Colóquelas en un recipiente adecuado y vierta agua hirviendo sobre ellas. Escurra el líquido después de siete minutos.

Aparte, hierva la cantidad necesaria de agua y azúcar, luego agregue la fruta. Cocine a fuego lento la mermelada durante diez minutos. Después de la cocción, tape el postre y déjelo reposar durante diez horas. Transcurrido este tiempo, hierva la mermelada otros diez minutos y luego viértala en frascos al vapor. Ciérrelos bien.
Arándanos rojos remojados en agua
El beneficio de los arándanos rojos remojados radica en la conservación de una gran cantidad de vitaminas en las bayas y en el agua de arándanos rojos.
Necesitarás los siguientes componentes:
- 1,5 kilogramos de arándanos rojos;
- 1,5 litros de agua purificada;
- 150 gramos de azúcar;
- una cucharadita de sal.
Añade sal y azúcar al agua, ponla en la estufa y cocina a fuego lento durante unos minutos. Retira del fuego y deja enfriar. Selecciona las bayas, lávalas y sécalas con papel absorbente. Coloca las bayas en una botella esterilizada y vierte el líquido frío sobre ellas. Ciérrala con una tapa de nailon y guárdala en el refrigerador.
Congelación
Las bayas recolectadas en 24 horas son ideales para congelar. Deben clasificarse, lavarse y colocarse en una sola capa sobre un paño de cocina para eliminar la humedad.
No debería haber mucho hielo en la bolsa de arándanos rojos congelados.

Coloque las bayas deshidratadas en bolsas especiales para congelar. Congélelas en el congelador. No se conservan más de doce meses.
Almacenamiento de arándanos rojos en azúcar
Coloque un kilo de arándanos rojos lavados y secos en un frasco esterilizado. Espolvoree las capas de arándanos rojos con azúcar; necesitará un kilo de azúcar granulada en total. Agite el frasco, ciérrelo con una tapa de nailon y colóquelo en el estante inferior del refrigerador.
Secado de bayas
Coloque los arándanos rojos en una sola capa sobre una bandeja para hornear y métalos en un horno precalentado a 60 grados Celsius. Remueva los arándanos mientras se secan. Deje enfriar los arándanos secos y colóquelos en una bolsa de tela.

Preparaciones en almíbar
Preparar arándanos rojos en almíbar es muy fácil: no lleva mucho tiempo de preparación.
Ingredientes necesarios:
- un kilogramo de arándanos rojos;
- 300 gramos de azúcar fina;
- ralladura de un limón;
- 500 mililitros de agua.
Añade azúcar y ralladura de limón al agua caliente y cocina a fuego lento durante cinco minutos. Deja enfriar hasta que esté tibio. Coloca las bayas limpias en un frasco hervido al vapor y vierte el almíbar frío sobre ellas. Ciérralo bien.
Enlatado en su propio jugo
Para su conservación es necesario llevar:
- un kilogramo de arándanos rojos;
- 0,5 kilogramos de azúcar.
Vierta dos cucharadas de agua en el fondo de un recipiente para cocinar, agregue las bayas lavadas y póngalas a fuego lento. Cocine durante diez minutos, removiendo constantemente y añadiendo azúcar. Luego, coloque las bayas en frascos esterilizados, vierta el almíbar hirviendo sobre ellos y ciérrelos.
Otra forma de conservar los arándanos rojos en su propio jugo sin tratamiento térmico es usar un barril o botella de madera. Los arándanos rojos lavados se vierten en el recipiente preparado hasta una profundidad equivalente a una caja y media de cerillas. Se presiona firmemente y se cubre con una capa de dos centímetros de azúcar. Esto llena todo el recipiente. Las bayas se colocan como capa final. El recipiente herméticamente cerrado se conserva en un lugar cálido durante dos días para que el jugo se libere mejor. Luego, se lleva a una bodega fresca.











