- Los entresijos de la elaboración de compota de grosella y naranja
- Preparación de grosellas
- Selección de naranjas
- Métodos de preparación de compota
- Una receta sencilla para el invierno.
- Compota de grosellas con naranja y menta
- Compota de grosella y naranja – "Jengibre"
- Compota de grosellas con naranjas y miel
- Características de almacenamiento
La compota de grosella y naranja conserva los micronutrientes beneficiosos necesarios para el organismo durante el frío. Esta bebida es beneficiosa para afecciones cardíacas y vasculares. También ayuda a fortalecer el sistema inmunitario, combatiendo así las enfermedades respiratorias. Sin embargo, los cítricos no se recomiendan para personas con afecciones gastrointestinales o alergias.
Los entresijos de la elaboración de compota de grosella y naranja
Las grosellas de cualquier tamaño, variedad y grado de madurez son aptas para compota. Esta baya tiene una piel firme que se mantiene intacta durante el tratamiento térmico.
Las grosellas deben pelarse, lavarse y secarse antes de envasarse. No se deben añadir a la bebida bayas con defectos visibles.
Las naranjas aportan el sabor y aroma principales a la compota. En su preparación se utilizan tanto cítricos enteros como cáscaras individuales.
Los ingredientes no se hierven, sino que se vierten varias veces en el almíbar caliente. Si se desea, se puede añadir menta, vino y otros ingredientes.
Las tapas y los frascos se pueden esterilizar con vapor o en el horno. Al elegir esta última opción, es importante seguir una regla: colocar los recipientes en un horno frío y retirarlos una vez que se hayan enfriado.

Preparación de grosellas
Si usa bayas compradas en el mercado, elija las variedades de primera calidad o de miel. No se recomienda usar grosellas verdes.
Las bayas grandes (las ligeramente verdes son ideales) son las mejores para la compota. Tienen un aroma agradable que no se ve eclipsado por los cítricos.

Selección de naranjas
Los cítricos maduros con cáscara de naranja son ideales para esta bebida. Antes de comprarlas, se recomienda inspeccionarlas para detectar moho, podredumbre y hongos. Los hongos también atacan el interior de la fruta, lo cual es especialmente peligroso.
Según la receta, los cítricos se cortan en gajos o se utilizan con la cáscara. En este último caso, la cáscara se trata con agua hirviendo.

Métodos de preparación de compota
Deje enfriar la bebida de bayas y cítricos antes de guardarla. Después, los frascos pueden colocarse en un lugar fresco.
Una receta sencilla para el invierno.
Para preparar una bebida rápidamente, es necesario preparar:
- 2 tazas de bayas;
- 1 naranja (preferiblemente grande);
- 300 gramos de azúcar;
- 2 litros de agua.
La naranja preparada y cortada en rodajas se coloca en los recipientes junto con los frascos. El azúcar se mezcla con agua y se hierve a fuego alto hasta su completa disolución. El almíbar resultante se vierte en los frascos, que luego se sellan.
Compota de grosellas con naranja y menta
Esta deliciosa bebida está hecha a base de:
- 500 gramos de bayas;
- 1-2 ramitas de menta fresca;
- 1 naranja;
- 150 gramos de azúcar.

La naranja se corta en gajos y se coloca en el fondo de la olla. Luego, se presiona suavemente para liberar el jugo. Es importante no presionar demasiado la cáscara, ya que el producto final adquirirá un sabor amargo.
Después de una hora, vierte el jugo de naranja en una cacerola, llévalo a ebullición y retíralo del fuego. Agrega las ramitas de menta al mismo recipiente. Después de unos minutos, retira las ramitas y añade agua y azúcar al jugo. Luego, mezcla los ingredientes con las bayas y deja hervir la infusión a fuego medio.
La bebida debe hervirse durante varios minutos. La compota se vierte en frascos una vez que se haya enfriado por completo.
Compota de grosella y naranja – "Jengibre"
El jugo de jengibre se elabora combinando los siguientes ingredientes:
- 2 naranjas medianas;
- 400 gramos de grosellas;
- 2 ramas de canela;
- 70 milímetros de raíz de jengibre;
- medio limón;
- 200 gramos de azúcar;
- 3 anís estrellado.

Si lo desea, agregue 20 gramos de vainilla y pimienta gorda al jugo.
Primero se pela el jengibre y los cítricos se cortan en rodajas de 7 milímetros de grosor. Se colocan todos los ingredientes en una cacerola, alternándolos. Después de 40 minutos, se añaden 3 litros de agua a la cacerola.
Para lograr el sabor a jengibre, el jugo se cuece a fuego alto durante varios minutos y luego se vierte en frascos esterilizados. Esta compota también se puede servir inmediatamente.
Compota de grosellas con naranjas y miel
Por cada kilo de cítricos, necesitarás 2 kilos de frutos rojos. Para el almíbar, necesitarás 200 gramos de miel y 800 gramos de azúcar.
Los cítricos se pelan y se cortan en gajos pequeños. Los ingredientes se distribuyen uniformemente en el fondo de frascos esterilizados.
Vierta 5 litros de agua en una cacerola y añada el azúcar. Lleve la mezcla a ebullición. Luego, añada la ralladura. Cocine a fuego lento durante 15 minutos. Vierta el almíbar en frascos y déjelo reposar media hora. Cierre los frascos.
Transcurrido el tiempo indicado, vierta el almíbar en una cacerola, llévelo de nuevo a ebullición y cocínelo a fuego lento durante 15 minutos. Luego, añada la mezcla, junto con la miel, al resto de los ingredientes. El almíbar debe llenar los recipientes hasta unos 15 milímetros por encima del borde superior.

Características de almacenamiento
Se recomienda almacenar los frascos de jugo fortificado en lugares frescos, lejos de la luz solar.
Una vez abierta la compota deberá conservarse en el frigorífico.
La vida útil es de 3 años. Una vez abierto, el jugo debe consumirse en un plazo de 3 días.












