- Cómo hacer compota de grosellas para el invierno
- ¿Con qué bayas combina?
- ¿Qué variedades de grosellas es mejor elegir?
- Cómo elegir grosellas antes de iniciar el proceso
- Cómo hacer compota de grosellas en casa
- Una receta sencilla paso a paso para un tarro de 3 litros.
- Sin esterilización
- Con limón
- De grosellas congeladas
- Con estragón
- Con grosella negra
- Con menta
- Con naranja
- Con una manzana
- Con frambuesas
- Almacenamiento de compota
Las grosellas son una baya bastante común, pero rara vez se consumen frescas. Se suelen añadir a diversas compotas y zumos. A pesar de su relativamente baja demanda, esta baya es una auténtica fuente de pectina, vitaminas, ácidos orgánicos y otros micronutrientes valiosos. Por lo tanto, una saludable compota de grosellas para el invierno es una excelente manera de conservar las vitaminas del verano.
Cómo hacer compota de grosellas para el invierno
Es fundamental perforar cada baya antes de sellarla, ya que tienen una piel gruesa; esto evitará que exploten en el frasco. También tendrás que quitarles los tallos.
Las recetas pueden requerir esterilización o no. Si usa un recipiente más grande, puede omitir el paso de esterilización.
¿Con qué bayas combina?
Para un color más intenso y un mejor sabor, añada grosellas negras, cerezas o fresas. También puede añadir manzanas, cítricos y albaricoques.
Pero vale la pena recordar que otros ingredientes pueden oscurecer el sabor del producto principal.
¿Qué variedades de grosellas es mejor elegir?
Las grosellas verdes darán como resultado una bebida transparente. Se suele añadir menta y otros aditivos para darle frescura. Las grosellas rojas darán un hermoso color rosado, que se puede realzar con cítricos. Las grosellas negras crearán una compota de color rubí.

Cómo elegir grosellas antes de iniciar el proceso
Para la conservación invernal, solo se utilizan frutas firmes, sanas y sin moho. La misma regla se aplica a todos los demás ingredientes añadidos a la bebida.
Cómo hacer compota de grosellas en casa
Eligiendo entre una amplia variedad de recetas, podrás encontrar la forma más cómoda y deliciosa de conservar este producto.
Una receta sencilla paso a paso para un tarro de 3 litros.
Incluso las bayas sin procesar con tallo son adecuadas para esta receta.
Ingredientes:
- 300 gramos de grosellas;
- 100 gramos de azúcar;
- 3 litros de líquido.

Preparación: Prepare un jarabe dulce hirviendo agua con azúcar refinada. Luego, sumerja las bayas partidas en el agua hirviendo. Cocine a fuego lento durante 15 minutos. Vierta la compota en recipientes estériles y ciérrelos. Dé la vuelta a los recipientes y envuélvalos.
Sin esterilización
Puedes preparar una bebida de bayas utilizando un método más rápido: sin tratamiento térmico.
Ingredientes:
- 2 tazas de grosellas;
- 150 gramos de azúcar;
- 3,5 litros de agua.

Preparación: Coloque las bayas preparadas en frascos y vierta agua recién hervida sobre ellas. Tape sin apretar y deje reposar durante 15 minutos. Escurra el líquido en un recipiente aparte, añada la cantidad indicada de azúcar y llévelo a ebullición. Vierta el agua de nuevo en los frascos con las bayas. Enrolle los frascos, colóquelos boca abajo y guárdelos más tarde.
Con limón
Si preparas compota con la adición de productos cítricos, obtendrás una bebida agradable y refrescante con efecto tónico.
Ingredientes:
- 1 taza de bayas verdes;
- 80 gramos de azúcar;
- medio limón;
- un litro de agua.

Instrucciones: Coloque las grosellas y las rodajas de limón en un recipiente. Prepare el almíbar dulce: hierva agua y azúcar refinada en una cacerola. Vierta el líquido dulce en los frascos llenos. Coloque los frascos con las grosellas en un recipiente con agua hirviendo y esterilícelos durante 20 minutos. Enróllelos, déjelos enfriar y guárdelos.
De grosellas congeladas
Las bayas congeladas son perfectas para este tipo de conserva. Se suelen añadir diversas frutas para realzar el sabor. Preparación: Para conservar la compota de frutas congeladas, primero ponga grosellas y otras rodajas de fruta en una cacerola y añada suficiente líquido. Lleve la mezcla a ebullición y cocine a fuego lento durante 15 minutos más. Luego, añada el azúcar granulado y espere hasta que se disuelva por completo. Enrolle, deje enfriar y guarde para más tarde.
¡Importante! No es necesario descongelar las grosellas previamente.
Con estragón
Con esta receta podrás preparar una bebida picante y aromática con diversas hierbas.

Ingredientes:
- 2 tazas de fruta;
- 150 gramos de azúcar;
- 3 litros de agua;
- medio limón;
- hojas de menta.
Preparación: Colocar las grosellas en un recipiente, añadir las hierbas y el limón. Verter el líquido hirviendo en los recipientes llenos y dejar reposar durante 20 minutos. Verter el agua de la infusión en un recipiente aparte, añadir azúcar refinada y preparar un almíbar dulce. Verter el líquido sobre las grosellas, envolver y refrigerar.

Con grosella negra
Añadiendo este componente se obtiene una compota deliciosa y bonita.
Ingredientes:
- 300 gramos de bayas;
- medio vaso de grosellas;
- 100 gramos de azúcar;
- 2 litros de agua.
Instrucciones: Vierta el líquido hirviendo en frascos de vidrio llenos de bayas. Tape sin apretar y deje reposar durante 20 minutos. Vierta el agua infusionada en un recipiente aparte. Añada azúcar refinada y hierva el almíbar dulce. Vierta el líquido dulce de nuevo en los frascos llenos, cierre bien y deje enfriar. Conserve para más tarde.

Con menta
Una compota refrescante con un componente relajante que aportará un aroma veraniego. Ingredientes:
- un vaso de bayas;
- un litro de agua;
- 60 gramos de azúcar;
- ramitas de menta.
Instrucciones: Coloque las grosellas y la menta en recipientes esterilizados. Vierta agua recién hervida sobre ellas y deje hervir a fuego lento durante 10 minutos. Vierta en una cacerola, añada azúcar y deje que vuelva a hervir. Vuelva a colocarlas en los frascos. Enrolle y guarde.

Con naranja
El invierno es la época en la que las vitaminas se necesitan más que nunca. Una bebida con naranja te ayudará a reponer las vitaminas que te faltan y a aumentar tu energía.
Ingredientes:
- 2 tazas de fruta;
- una naranja entera;
- agua;
- 250 gramos de azúcar.
Preparación: Coloque las grosellas y las rodajas de naranja en los frascos previamente preparados. Luego, prepare un almíbar dulce hirviendo agua con azúcar refinada. Vierta este líquido en los frascos llenos y ciérrelos inmediatamente. Voltee los frascos, envuélvalos en una manta y déjelos enfriar. Guárdelos para su conservación.

Con una manzana
Esta compota quedará clara, pero a la vez muy dulce y sabrosa.
Ingredientes:
- 5 manzanas dulces;
- medio vaso de bayas;
- 150 gramos de azúcar;
- 3 litros de agua.
Preparación: Prepare rodajas de manzana. Coloque las grosellas verdes perforadas y las rodajas de manzana en frascos esterilizados. Vierta un almíbar dulce de agua hirviendo y azúcar refinada sobre los frascos llenos. Caliente los frascos al baño maría. Conserve el contenido.

Con frambuesas
Las frambuesas dulces combinan bien con las grosellas, dando como resultado una compota inusualmente delicada con un aroma agradable.
Ingredientes:
- 2 tazas de grosellas;
- un vaso de frambuesas;
- 150 gramos de azúcar.
Preparación: Coloque la fruta preparada en recipientes estériles y vierta agua recién hervida sobre ella. Tape sin apretar y deje reposar durante 20 minutos. Vierta el líquido de los frascos en otro recipiente, agregue azúcar y deje hervir. Regrese la fruta a los recipientes llenos. Enróllela, enfríela y guárdela para un almacenamiento prolongado.
Almacenamiento de compota
Al igual que otras compotas, esta bebida requiere conservarse en una bodega o despensa. Bien preparada, la compota puede conservarse durante mucho tiempo sin perder su sabor ni su delicioso aroma.











